Un hombre de 33 años ha sido detenido y acusado del homicidio agravado de su hijo de tan solo un año y medio. Se trata de Scott Allen Gardner, quien está imputado por la muerte de su hijo Sebastian, que ha muerto asfixiado tras permanecer más de tres horas encerrado en una camioneta a pleno sol.
Según la investigación, el padre ha abandonado a su hijo en el vehículo para irse a un bar con los amigos durante un día soleado con temperaturas de 32 grados en Florida, Estados Unidos. Sin embargo, en el interior de la camioneta, la situación era peor: se alcanzaron los 44 grados, según la policía.
Homicidio
El niño permaneció 3 horas encerrado en una camioneta, con temperaturas de más de 40 grados
Scott Allen Gardner había dejado un poco bajadas las ventanillas de su vehículo y hasta había conectado un pequeño ventilador, pero no sirvió de nada. El niño de 18 meses murió sofocado.
“Este padre es una basura humana, un mentiroso”, ha declarado el alguacil Michael Chitwood en una conferencia de prensa. “En realidad, está donde debe estar, tras las rejas. No hay razón para que este niño esté muerto”, ha añadido.
El hombre de 33 años está detenido, sin derecho a fianza
Según las autoridades, Gardner dejó a Sebastian en su camioneta a las 11:30 horas mientras iba a un bar. A pesar de que Gardner había llevado a su hijo al bar en otras ocasiones, los testigos afirmaron no haber visto al menor en el vehículo ese día.
En un momento, Gardner salió a ver un choque que se había producido en el estacionamiento, pero nunca se acercó a verificar el estado de su hijo. “¿Cómo puedes estar tan trastornado que dejas que tu hijo esté sentado allá en Florida, con 32 grados, salgas a revisar un coche y nunca te acerques a él?”, ha cuestionado el sheriff.
El padre del menor ha sido detenido e imputado por homicidio
Gardner solo se dio cuenta de que su hijo no respiraba cuando regresó a la casa de su madre. Desesperado, llamó al 911, pero los esfuerzos de los médicos fueron en vano, ya que el niño mostraba signos de rigor mortis.
Las autoridades creen que Sebastian estuvo muerto durante dos horas antes de que su padre llamara al 911, poco antes de las 15 horas. El hombre de 33 años se encuentra ahora detenido, sin derecho a fianza.