Un pasajero en un avión le dice a la persona al lado que su ordenador es una bomba y fuerza un rápido aterrizaje de emergencia
A juicio
El hombre, que es un paciente psiquiátrico, ahora se enfrenta a la cárcel y al pago de una cuantiosa multa
Un avión de la compañía Allegiant Air
Ya en pleno vuelo repleto de personas, el comentario de un pasajero que decía que su ordenador portátil era una bomba ha obligado a forzar un aterrizaje de emergencia. El avión, que salía desde Florida, tuvo que volver a tierra después de que este varón, que es un paciente psiquiátrico que ha sido recientemente liberado, lanzase la amenaza. Así se desprende de la información publicada por The New York Post.
Se trata de Taj Malik Taylor, de 27 años. Estaba a bordo del vuelo 1023 de Allegiant Air que volaba desde el Aeropuerto Internacional de St. Pete-Clearwater en Florida hacie el Aeropuerto Regional de Roanoke-Blacksburg en Virginia. La aeronave contaba con 177 pasajeros y seis miembros de la tripulación el domingo por la tarde, cuando Taylor hizo los aterradores comentarios, según ha informado la Oficina del Sheriff del Condado de Pinellas.
A juicio
Taylor se enfrenta a una multa de hasta 25.000 dólares, a una sentencia de prisión de hasta 5 años o ambas si es declarado culpable de hacer una falsa amenaza de bomba
Los hechos ocurrieron menos de una hora después del despegue, cuando Taylor, supuestamente, le dijo a su compañero de asiento: “Tengo una bomba”, al menos dos veces. Cuando el pasajero le preguntó por qué haría una afirmación tan grave, Taylor supuestamente le mostró su portátil y dijo: “Mi ordenador portátil es una bomba”, según una declaración jurada del FBI obtenida por USA Today.
Asustado, el compañero de asiento de Taylor informó inmediatamente a los auxiliares de vuelo. Esto provocó que llevó al piloto diese la vuelta en el rumbo del avión y terminase aterrizando de emergencia en St. Pete-Clearwater unos 40 minutos después del despegue.
Taj Taylor, de 27 años, fue arrestado después de afirmar que su portátil era una bomba
A la llegada del avión a tierra, los oficiales del Sheriff del Condado de Pinellas ya estaban esperando el avión, quienes habían sido alertados por una “amenaza verbal de bomba”. “Los detectives dicen que varios otros testigos en el avión también escucharon a Taylor decir que tenía una bomba”, ha informado la policía.
Las autoridades abordaron el avión alrededor de las 14 horas y arrestaron a Taylor. Además, una unidad K-9 a revisó sus pertenencias. Después de que lo sacaran del vuelo de Allegiant, el avión despegó nuevamente y llegó a Roanoke alrededor de las 19:57 horas.
“Allegiant no tolera ningún tipo de comportamiento disruptivo, por lo que se tomó la decisión de regresar al aeropuerto”, ha declarado un portavoz de Allegiant Air a USA Today.
“El avión aterrizó sin problemas y fue recibido por agentes del orden público, quienes detuvieron al pasajero”, han agregado. Taylor ha sido acusado de delitos graves por amenazas e información falsa en primer grado. Ha quedado en libertad bajo custodia de los alguaciles estadounidenses.
Taylor dijo que es un veterano de la Fuerza Aérea de Estados Unidos
Taylor hizo su aparición inicial en la corte federal de Tampa el lunes por la tarde. Una declaración jurada del FBI decía que “Taylor no admitió haber hecho las amenazas de bomba, pero afirmó que [la mujer sentada a su lado a bordo del vuelo] fue grosera con él”.
Taylor declaró que recientemente había salido de un centro de salud mental. Declaró que tomó su medicación la noche anterior y que actualmente sufría de falta de claridad mental, según la declaración jurada. También dijo a los investigadores que “tiene más claridad cuando toma su medicación”.
Taylor es una ex estrella de fútbol de la escuela secundaria en Largo, Florida. Sufrió una conmoción cerebral grave de grado 3 durante su segundo año en 2013, según el citado medio. El golpe fue tan fuerte que perdió el conocimiento durante más de 10 minutos. Las conmociones cerebrales de grado 3 están relacionadas con problemas neurológicos a largo plazo.
Taylor también afirma ser un veterano de la Fuerza Aérea de EE. UU. y actualmente es estudiante de seminario en la Universidad Liberty en Lynchburg, Virginia, según el Daily Mail. Ahora, Taylor se enfrenta a una multa de hasta 25.000 dólares y a una sentencia de prisión de hasta cinco años o a ambas si es declarado culpable de hacer una falsa amenaza de bomba.