El principal sospechoso del crimen de Helena Jubany pide salir de la cárcel: “La prueba de ADN es un indicio endeble”

Asesinato sin resolver

En un escrito presentado al juzgado, Santiago Laiglesia asegura que pudo haber ADN en el jersey que vestía el día del crimen fruto de contactos anteriores en la Unió Excursionista

El principal sospechoso del crimen de Helena Jubany pide salir de la cárcel: “La prueba de ADN es un indicio endeble”
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El principal sospechoso del crimen de Helena Jubany pide salir de la cárcel: “La prueba de ADN es un indicio endeble”

ACN

Santiago Laiglesia, principal sospechoso del asesinato de Helena Jubany, en diciembre de 2001, ha presentado recurso para solicitar su puesta en libertad. En un recurso presentado ante el juzgado de Sabadell,  sostiene que  su encarcelamiento es desproporcionado y por primera vez ofrece una explicación a la presencia de ADN suyo en el jersey que vestía la víctima el día de su asesinato. Asegura que pudo tratarse de “un abrazo o gesto de contacto entre amigos” realizado durante los días previos. Considera que se trata de un indicio “endeble” y que no permite dar un “vuelco a la investigación”.

El principal sospechoso del crimen de Helena Jubany pide salir de la cárcel: “La prueba de ADN es un indicio endeble”

Entrada a declarar de Santi Laiglesia, principal sospechoso en el caso Helena Jubany, en Sabadell, 28 de noviembre de 2025 

Joan Mateu Parra / Shooting / Colaboradores

La Policía encontró una mezcla de perfiles genéticos en la parte trasera del jersey que vestía Helena Jubany el día de su asesinato. Las prendas aparecieron dobladas en una repisa de la azotea desde donde fue arrojada la joven de 27 años. Tras numerosos análisis para separar los perfiles, el último dio un resultado positivo: la muestra encontrada era 26 billones de veces más probable que fuese de Santiago Laiglesia que de cualquier otra persona. La jueza interpreta que ese indicio supone que Laiglesia tuvo contacto físico con la víctima el día del crimen y apunta a que podría corresponderse con “una agresión física o la maniobra de desvestir a la víctima antes de ser precipitada”.

Laiglesia asegura que su ADN pudo estar en el jersey de la víctima por “un  abrazo o gesto de amistad” antes del crimen

En su recurso, la defensa de Laiglesia responde que se desconoce cuándo coincidió por última vez con Jubany y recuerda que ambos participaban en actividades de la Unió Excursionista de Sabadell. Además, añade que el ADN fue hallado “en la parte inferior de la zona de la espalda, una zona muy común de contacto entre amigos o conocidos, como puede ser un abrazo, un gesto de contacto, de amistad”, También sostiene que un jersey “es una prenda de ropa que la gente suele repetir sin que cada vez que se utiliza haya sido previamente lavada, es decir, que si el jersey se encontraba limpio la víctima podía tenerlo guardado en su armario después de haberlo utilizado en otras ocasiones y haberlo vuelto a utilizar el día que salió de su domicilio por última vez”.

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La jueza de instrucción decretó prisión provisional para Laiglesia al considerar que existe riesgo de fuga, —por la elevada pena a la que podría enfrentarse— y riesgo de destrucción de pruebas por la influencia que podría ejercer sobre otros miembros de la Unió Excursionista de Sabadell que deberán declarar en el juicio. La defensa replica que “el grupo de conocidos o de relación de Laiglesia, que contrajo incluso matrimonio con una persona ajena al momento de los hechos, ha variado y que su grupo de amistad es totalmente diferente, habiendo por otra parte ya declarado en su momento todas las personas que fueron cercanas al investigado”.

Dos testigos aseguran que el principal sospechoso de la muerte de Helena Jubany vivía en el edificio donde se produjo el crimen

Dos testigos declararon este miércoles ante la jueza que investiga el caso que Santiago Laiglesia residía en el edificio de la calle Calvet d’Estrella donde se cometió el asesinato. Así lo sostuvieron un hombre que realizaba tareas de mantenimiento en el piso donde supuestamente vivía la pareja y la hermana de Montserrat Careta, la novia de Laiglesia, que se suicidó en prisión proclamando su inocencia.

En los primeros meses de la investigación, en diciembre de 2001, el juez instructor descartó que Laiglesia viviera con Careta, lo que rebajó las sospechas sobre él y las centró en la inquilina del inmueble. Ahora, los testigos aseguran lo contrario. El encargado del mantenimiento —pariente de la propietaria del piso— recordó que Careta le pidió antes del crimen que añadiera a Laiglesia al contrato de alquiler, trámite que finalmente no se formalizó. La hermana de Careta ha añadido que el nombre de Laiglesia figuraba en el buzón de la finca.

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