La Unión Europea de Radiodifusión (UER) ha aprobado formalmente este jueves la participación de Israel en Eurovisión 2026. Como consecuencia, el presidente de RTVE, José Pablo López, ha anunciado oficialmente la retirada de España del certamen, algo histórico, ya que supondrá la primera vez desde su debut en 1961, con Conchita Bautista y su canción Estando contigo, que España no envía representante al festival.
Melody, con su canción 'Esa diva' fe la última representante de España en Eurovisión.
La decisión de RTVE, y, por tanto, de España, no ha sido aislada: junto a ella, han optado por retirarse del concurso otros países como Países Bajos, Irlanda y Eslovenia. El desencadenante común ha sido la ratificación por parte de la UER de la inclusión de Israel, pese al conflicto en Gaza y las denuncias de posibles interferencias políticas por parte de la emisora israelí.
Festival de Eurovisión 1969. Salomé ganó el certamen para España con la canción 'Vivo cantando'. Será la segunda y última victoria de nuestro país.
La ausencia de España en Eurovisión 2026 deja huérfanos en el futuro inmediato los triunfos históricos de Massiel con L a, la, la y Salomé con Vivo cantando, hasta los momentos recientes en los que España volvió a ilusionarse con candidaturas como la de Chanel en el 2022 —que devolvió al país al podio tras casi tres décadas— o la sensibilidad de Pastora Soler y Ruth Lorenzo, que lograron situar de nuevo a España en el mapa eurovisivo.
En cuanto al impacto, la retirada de España no es solo simbólica. España es uno de los países del llamado “Big Five” —aquellos que más contribuyen económicamente a la UER y que con ello tienen pase directo a la final—. Su salida representa un serio revés institucional y pone en cuestión la capacidad del festival para mantenerse como un espacio “neutral” frente a tensiones políticas internacionales.
A nivel cultural y mediático, la ausencia de España altera las dinámicas de audiencia y la repercusión en la visibilidad internacional que ofrece el festival. Deja sin posibilidades a seguidores y espectadores, pues la corporación aseguró que no emitirá ninguna de las galas del festival, lo que implica que España quedará totalmente fuera de la cita. La retirada de un país de gran peso mediático y de audiencia debilita la convocatoria general del certamen.
No obstante, el hecho de que España se retire de Eurovisión 2026 no pone en peligro al Benidorm Fest. RTVE junto con la Generalitat Valenciana ya ha confirmado que el Benidorm Fest 2026 se celebrará con normalidad en febrero de 2026. Mantiene su formato habitual (semifinales y final), su sede en Benidorm, y aun prevé premiar al ganador con un incentivo económico importante —en esta edición, 150.000 € en total. Pero el destino del ganador no será Eurovisión 2026.
En su comunicado, RTVE ha explicado que su retirada se basa en que la presencia de Israel “es insostenible” mientras persista la situación humanitaria en Gaza. Además, la corporación aseguró que tampoco emitirá ninguna de las galas del festival lo que implica que España quedará totalmente fuera de la cita.
La decisión del ente público se había anticipado hace meses. En septiembre de 2025, el Consejo de Administración de RTVE aprobó –por mayoría absoluta– que España se retiraría si la UER no excluía a Israel del concurso. En esa época, el debate político ya había comenzado, con declaraciones del ministro de Cultura advirtiendo de que no se podía “normalizar” la presencia israelí mientras continuaba la guerra en Gaza.
