Loading...

Todo lo que el iPhone tenía que cambiar

Sin poder desvelar información embargada a la que tuve acceso en Cupertino (California) esta semana, estoy convencido de que, a quien intente doblar uno de los nuevos iPhone Air, de sólo 5,6 milímetros de grosor, se le va a torcer el gesto. Esa simple característica física, la resistencia a la deformación, forma parte de una serie de conceptos que Apple ha cambiado para darle un giro al producto más fundamental de su negocio: el iPhone.

Tim Cook, consejero delegado de Apple, sostiene un iPhone 17 Pro Max y un iPhone Air el pasado martes en el Steve Jobs Theater 

David Paul Morris/Bloomberg

En el caso del nuevo modelo, que acaparó la atención el martes por su ligereza y delgadez, la apuesta de Apple es que se trata del móvil más duradero que han fabricado. El Air se lleva los focos por diseño, pero la compañía destaca que puede ser un producto de batalla. Su principal handicap es la batería. En su s 5,6 milímetros, cabe muy poca. Una gestión inteligente del rendimiento optimizará mucho el consumo, pero la idea de que tiene batería “para todo el día” sugiere que sus usuarios tendrán que hacer cargas extras.

Apple ha cambiado para darle un giro al producto más fundamental de su negocio

El planteamiento de hacer del iPhone Air un móvil duradero parece coherente. Si pagas 1.219 euros por un teléfono que en batería y cámaras es más limitado que el iPhone 17 (que cuesta 929 euros), al menos que te dure mucho. Apple ha equipado a todos los nuevos modelos con un nuevo cristal cerámico muy reforzado, Ceramic Shield 2. No sólo en su pantalla, sino también en su parte trasera tanto en los Pro como en el Air.

En los modelos más completos (y caros), los iPhone 17 Pro y 17 Pro Max, Apple también ha cambiado más cosas de las que parece. El bisel de titanio que utilizaron los iPhone 15 Pro y 16 Pro ha sido cambiado por un material que disipa mucho mejor el calor, el aluminio. La compañía responde así a las críticas sobre el exceso de calor que se generaba en algunos de esos modelos de hace un par de años. Apple ha pasado, finalmente, a ser práctica. Hay que gestionar mejor el calentamiento, pero en este caso no se trata de una simple sustitución de materiales.

Por primera vez, un iPhone ha sido montado en una carcasa unibody , un concepto que se aplica desde hace años a los ordenadores Mac y que consiste en crear una base sólida a partir de un solo bloque de aluminio. Apple le ha añadido además un componente que hasta ahora sólo habíamos visto en algunos móviles Android: una cámara de vapor para controlar el calentamiento del procesador.

Ese elemento, situado por encima del chip A19 Pro, difumina el calor y lo aleja hacia la estructura de aluminio cuando es muy exigido, por ejemplo, con el uso de videojuegos o de determinadas aplicaciones de inteligencia artificial. Pero poner una pieza como esa no sólo implica cambios en la estructura, sino también en la distribución de todos los componentes en el minúsculo espacio del que dispone un móvil.

Por último, las nuevas cámaras traseras de todos los iPhone, pasan a ser todas de 48 megapíxeles, y el concepto Fusion, que aprovecha recortes para dotar a cada móvil de más distancias focales de las que en realidad tiene, completan la idea de que la transformación ha sido seria.

El iPhone 17 ha sido actualizado en su pantalla con la tecnología ProMotion, una tasa de refresco adaptativa de hasta 120 Hz que le proporciona más fluidez, mejores cámaras y protección Ceramic Shield de última generación. Es casi un modelo Pro de hace un par de años. Una nueva apuesta de cambios.

Lee también

Por otra parte, la nueva función de traducción simultánea anunciada durante la presentación de los AirPods Pro 3 no la tendremos de momento en la UE. Lo que se puede hacer con otras grandes marcas con Android está vetado, al menos de momento, con iOS de Apple. El discurso contra los gigantes de la tecnología de la Comisión Europea está muy bien siempre y cuando todo el mundo deba cumplir las mismas reglas.

Etiquetas