El ‘Coldplaygate’ evidencia el coste social de las relaciones desiguales en una empresa

Infidelidad viral

Muchas organizaciones aplican políticas para evitar o incluso prohibir que sus trabajadores mantengan relaciones sexoafectivas

El CEO de la empresa Astronomer, Andy Byron, capturado en vídeo en la 'kisscam' del concierto de Coldplay en Boston en actitud romántica junto a Kristin Cabot, la directora de RRHH de la misma compañía

El CEO de la empresa Astronomer, Andy Byron, capturado en vídeo en la 'kisscam' del concierto de Coldplay en Boston en actitud romántica junto a Kristin Cabot, la directora de RRHH de la misma compañía 

TikTok

Millones de personas fueron testigos. Esta fue la sucesión de los hechos: el entonces director de la empresa tecnológica estadounidense Astronomer, Andy Byron, baila abrazado a la entonces directora de recursos humanos de esta compañía, Kristen Cabot, en un concierto de Coldplay. Aparecen en la kiss cam, una forma de entretenimiento común en encuentros multitudinarios en Estados Unidos, en la que se supone que las parejas del público deben besarse cuando se las enfoca. Sorprendidos al verse a sí mismos en pantalla, él desaparece del plano. Ella se esconde, visiblemente avergonzada.

“Estos dos o tienen una aventura o son muy tímidos”, dice en ese momento el cantante de Coldplay, Chris Martin. El vídeo se vuelve viral en las redes. Más de cien millones de personas lo ven en los primeros días. Internet se llena de comentarios sobre la presunta infidelidad de Byron o la cultura de trabajo en Astronomer. Algunos memes bromean con que de ese vídeo lo verdaderamente reprobable era asistir a un concierto de Coldplay. Byron abandona sus funciones como director de la compañía. Días después, Cabot hace lo propio.

Lee también

Dimite el CEO al que la 'kisscam' de Coldplay captó en plena infidelidad

Agencias
El CEO de la empresa Astronomer, Andy Byron, capturado en vídeo en la 'kisscam' del concierto de Coldplay en Boston en actitud romántica junto a Kristin Cabot, la directora de RRHH de la misma compañía

La prensa rosa, que enseguida lo entendió como la exposición de una relación extramarital, se lanzó en los días siguientes a relatar la reacción de la pareja de Bryon, que —según cuentan estos medios— habría borrado su apellido de casada de su perfil de Facebook justo antes de desactivar todos sus perfiles en redes sociales. Otros publicaron incluso declaraciones de la mujer, supuestamente enfadada con la actitud “banal” de Byron, y negándose a un perdón fingido, si bien no está claro que estas declaraciones sean verdaderas, pues fueron tomadas de un video que, advertían algunos usuarios, podría ser producto de la inteligencia artificial.

El vídeo del concierto, en todo caso, ha dado lugar a diversos juicios morales: por un lado, sobre la infidelidad —si es que hubo infidelidad, porque no se sabe qué acuerdo tenía Byron con su esposa— y la asimetría en los romances que se gestan entre jefes y empleados de una empresa; por otro, sobre la cultura de la hipervigilancia que reina en las redes sociales, y la intromisión en la vida privada de las personas en este tipo de espacios.

Lee también

“Recibió su merecido castigo”: Andy Byron ya no es solo el infiel más viral, también es un jefe agresivo y temido según sus exempleados

Héctor Farrés
El CEO de la empresa Astronomer, Andy Byron, capturado en vídeo en la 'kisscam' del concierto de Coldplay en Boston en actitud romántica junto a Kristin Cabot, la directora de RRHH de la misma compañía

El actual director en funciones de Astronomer, Pete DeJoy, compartió también su visión sobre cómo esta atención mediática “inusual” y “surrealista” sobre su equipo había convertido a la compañía en una que ya es “familiar”, aunque “no hubiera querido que pasara de esta manera”.

Pero también hubo críticas sobre la cultura “tóxica” de trabajo dentro de Astronomer por parte de algunos de sus ex empleados. Muchas organizaciones aplican políticas para evitar o incluso prohibir que sus trabajadores mantengan relaciones sexoafectivas, sobre todo si existe una dinámica de poder entre ellos.

Lee también

El amor es ciego, pero la 'kisscam' de Coldplay no: la infidelidad de un CEO y la directora de RRHH, al descubierto

La Vanguardia
La infidelidad de un CEO y la directora de RRHH, al descubierto

“A veces en el ámbito laboral se generan ciertas relaciones sentimentales o amorosas y suele ser, primero, por una mayor tiempo de exposición —pasamos muchas horas en el trabajo—, o porque hay una dinámica relacional muy diferente de la que hay fuera, muchas veces marcada por la jerarquía, o por los requerimientos de las propias tareas”, explica a La Vanguardia la psicóloga especializada en laboral Olga Merino, directora de Salud Mental en Avanta.

Merino señala que este tipo de relaciones pueden provocar tensiones emocionales significativas en las dos personas, tanto en la que ocupa el lugar de jefe como en el subordinado, y generar un clima conflictivo en el entorno de trabajo y, en consecuencia, afectar al desempeño laboral: “Está por un lado la tensión emocional asociada a la dificultad de valorar, de ser objetivo, de mantener la imparcialidad; y por otro la exposición a los demás, porque el resto de compañeros normalmente acaban siendo testigos de la dinámica personal que existe, y eso puede afectar tanto a la valoración que tienen tanto de la persona subordinada como del superior”.

La atracción a veces es real, pero puede tener un componente marcado por una relación laboral donde hay una jerarquía”

Olga MerinoPsicóloga especializada en laboral

En ese contexto, la experta sostiene que es muy difícil que en estas relaciones se dé una dinámica saludable. Además, la misma atracción puede estar distorsionada, dice, por la jerarquía vertical en la que se enmarcan, y las posibles presiones en que puede derivar.

“Esa atracción a veces es real, pero puede tener un componente marcado por una relación laboral donde hay una autoridad, donde hay una jerarquía, donde hay una admiración y respeto que pueden ser extrapolados y llevarse al ámbito personal. Y esto es frecuente”.

En estas relaciones hay conflictos de interés y una gestión emocional mucho más difícil que en cualquier relación”

Olga MerinoPsicóloga especializada en laboral

Por otro lado, la psicóloga apunta que siempre en estas relaciones hay conflictos de interés, y “hay una gestión emocional mucho más difícil que en cualquier relación”. “En todas las relaciones hay problemas de gestión emocional. En las que tienen lugar en el ámbito laboral o comparten también espacio laboral se incrementa esa dificultad porque además tienen un impacto en terceros, en compañeros, en el rendimiento, etcétera”, precisa Merino.

Más allá del escrutinio de los compañeros de la empresa, la reacción del público en el entorno digital y de los medios también ha suscitado críticas sobre la era del escrache y la hipervigilancia en las redes. Merino cree que en parte esta reacción puede deberse a una evolución en la conciencia social respecto a la igualdad y a la necesidad de frenar el abuso de poder en las empresas. 

“Socioculturalmente estamos mucho más concienciados con la igualdad, las necesidades que tenemos que tener, no abuso, el no tolerar ciertas conductas que puedan parecer sexistas o machistas o discriminen o potencien una imagen de la mujer como más vulnerable”, dice, pero advierte del riesgo de emitir juicios precoces: “A veces esa educación que vamos poco a poco recibiendo hace que algún hecho aislado sin conocer lo juzguemos como algo más allá”. 

Etiquetas
Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...