Los consejos de 'Supernanny' para que toda la familia salga de casa de buen humor por la mañana

Los hogares con niños pueden convertirse en auténticos campos de batalla durante las mañanas. Asearse, vestirse, desayunar, a estas y otras tareas y rutinas diarias hay que sumar el estrés y las prisas por llegar a tiempo al colegio, lo que, a menudo, se torna en una fuente de conflictos entre padres e hijos. Muchas veces, esto se ve acusado por el cansancio y la falta de paciencia de los padres, señala Míriam Tirado, consultora de crianza consciente. No obstante, dejarse llevar por estos sentimientos negativos no harán más que empeorar la situación. “Ellos necesitan tiempo y mimos por la mañana, y mucha empatía y comprensión”. ¿Cómo dejar de agobiarse entonces? El secreto está en unos buenos hábitos y organización.

Asegurarse de que los niños duerman lo suficiente, se preparen con antelación y sepan controlar el tiempo son algunos de los métodos más efectivos. No obstante, Anaïs Darder, educadora de familias en disciplina positiva, destaca otro más y que suele pasarse por alto debido a las prisas: la conexión entre padres e hijos. Ya sea acompañándolos durante unos minutos en su despertar o no olvidando darle un fuerte abrazo al dejarlos en el colegio. “Cambiar la perspectiva y tratar de vivir las mañanas en lugar de sufrirlas”, recomienda la especialista. 

La psicóloga y directora de Ramos Paul Psicólogos, Rocío Ramos, conocida como ‘Supernanny’, ha compartido una serie de recomendaciones para que las mañanas previas al colegio sean más fáciles para las familias. A través de su paso por ‘Atrévete’, de Cadena Dial, la especialista diferencia tres momentos clave para lograrlo. El primero de ellos es la noche anterior, en la que la preparación será fundamental. Por ello, Rocío Ramos incita a los padres a confirmar con sus hijos que se han llevado a cabo ciertos preparativos, por ejemplo, si estos han escogido la ropa para acudir al colegio al día siguiente y si tienen la mochila lista.

En segundo lugar, la mañana. En este punto, la psicóloga aconseja a los padres ser pacientes y adaptarse a sus hijos. “No todos nos despertamos igual”, señala. Su recomendación consiste en despertar a los niños diez minutos antes con tranquilidad, para darles el tiempo que necesitan. El siguiente tema que trata Rocío Ramos es el del desayuno, de nuevo, dependerá de cada niño: “Si no desayuna, no hay problema”. Pero ¿cómo lograr que los hijos mantengan la atención y cumplan con estas rutinas? El truco que ofrece la psicóloga tiene que ver con dar con un tema que le enganche. El objetivo a través de esa conversación es que el menor adopte el mismo tono del adulto, que ha de ser animado y positivo.

Otra herramienta sería recurrir a un reloj, que los padres emplearán para indicar al niño cuánto tiempo cuenta para hacer cada actividad. Si se retrasa o llora, los adultos deberán acompañar al menor, ayudarle y mantener un tono calmado. Más tarde llega el tercer momento clave: la vuelta del colegio. “Si todo ha ido bien, por favor, díselo”, sin embargo, si esto no ha sido así, Rocío Ramos aconseja evitar hacer comentarios.