El frescor de Alaska en la mesa con esta receta de salmón rojo salvaje, ideal para el verano

Cuando el calor aprieta, apetece apostar por platos frescos, ligeros y llenos de sabor. Pero ¿y si además fueran sostenibles, saludables y con un origen tan puro y salvaje? Este verano, el salmón rojo salvaje de Alaska se convierte en el ingrediente ideal por su calidad, por su beneficio nutricional y por su compromiso con el medio ambiente. 

El salmón rojo salvaje de Alaska se distingue por su color rojo intenso natural, que mantiene incluso después de cocinado, y por una carne firme y jugosa. Su alimentación a base de pequeños crustáceos y su vida en libertad influyen directamente en su calidad, textura y valor nutricional. Bueno para tu salud y para el medioambiente.

Detrás de este pescado no solo hay un mar limpio, sino también un sistema de pesca que es referente mundial. En Alaska, la pesca del salmón salvaje está regulada por la Constitución desde 1959, garantizando el equilibrio de los ecosistemas y la supervivencia de las especies a largo plazo. 

El salmón rojo salvaje de Alaska es también una opción inteligente desde el punto de vista nutricional. Rico en omega-3, proteína de alto valor biológico, vitamina D y astaxantina de origen 100% natural (un antioxidante natural que le da su color característico), es ideal para quienes buscan una alimentación equilibrada sin renunciar al placer de comer bien.

Salmón rojo salvaje de Alaska al horno con cítricos y ensalada de sandía, receta de @Lauraponts. 

Ingredientes:

Para el salmón salvaje al horno:

· Medio lomo de salmón rojo salvaje de Alaska 

· Sal y pimienta negra 

· 1 limón 

· 1 lima 

· ½ naranja 

· ½ pomelo 

· 3 cucharadas de salsa de soja 

· 1 cucharada de miel 

· Sésamo y jengibre fresco rallado 

· Eneldo 

· Aceite de oliva virgen extra

Para la ensalada de sandía: 

· 250 g de sandía en cubos 

· 150 g de fresas partidas 

· 1 pepino en rodajas 

· 70 g de queso feta desmenuzado 

· Un puñado de aceitunas negras 

· ½ cebolla morada laminada 

· Tomate (opcional) 

· Menta picada y hojas de albahaca 

· Zumo de 1 limón 

· 1 cucharadita de miel 

· Aceite de oliva virgen extra y sal

Preparación:

1. Preparar el salmón salvaje de Alaska. Quita la piel del lomo y corta el salmón salvaje en pequeñas porciones individuales. Salpimentar. Corta la naranja, el pomelo, la lima y el limón en rodajas y deposítalas de forma aleatoria sobre un recipiente apto para el horno, hasta cubrir la base. Coloca por encima las porciones de salmón rojo salvaje de Alaska y condimenta por encima con miel, aceite de oliva, salsa de soja, sésamo, eneldo y jengibre rallado. 

2. Llevar al horno precalentado a 180 °C durante 12–15 minutos, vigilando el tiempo de cocinado, ya que al ser un salmón salvaje contiene menos grasa y es preferible que el interior quede poco hecho. 

3. Preparar la ensalada. Mezclar en un bol la sandía, fresas, pepino, cebolla, aceitunas, queso feta y hierbas. Aliñar con limón, miel, aceite y sal. 

4. Emplatar el salmón rojo salvaje de Alaska con una buena cucharada de ensalada. Ideal para una comida ligera, una cena al aire libre o incluso como plato único para llevar. 

Disfrutar del sabor intenso y delicado del salmón rojo salvaje de Alaska es también una forma de apoyar la pesca responsable y sostenible, proteger los ecosistemas marinos y apostar por un modelo de alimentación más consciente. 

Este verano, refresca tu mesa con un producto salvaje, saludable, natural y sostenible. Descubre más recetas e información en www.alaskaseafood.es y en las redes sociales de @alaskaseafoodspain. 

Puedes encontrar el salmón rojo salvaje de Alaska en tu supermercado de confianza: Condis, Bonpreu, Plusfresc y Veritas.