La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) hace un seguimiento mensual de la variación de los precios internacionales de cinco grupos de alimentos básicos de la canasta: carnes, lácteos, aceites, cereales y azúcares.
El informe de junio de este año evidenció una subida general de 0,5% con respecto a mayo y de 5,5% en comparación al mismo mes del año pasado. Mientras los cereales y azúcares han registrado descensos tanto mensuales como anuales, los otros grupos llevan más de 12 meses al alza. Las carnes, lácteos y aceite han subido, en promedio, un 12%.
El precio mundial de los alimentos varía esencialmente por su volumen y costes de producción, además del transporte, el clima y otras contingencias.
Las carnes, que alcanzaron un máximo histórico, han sido el mes pasado un 4% más caras que en junio de 2024, lo que se expresó en el precio de productos provenientes de la vaca, el cerdo y el cordero. La única excepción fue el ave, que bajó.
Los lácteos, por su parte, costaron un 17% más que el año pasado. La mantequilla tuvo el precio más alto desde que hay registros, por suministros ajustados en Oceanía y Europa, mientras que el queso marcó un tercer mes al alza.
Los aceites también se han encarecido, con valores un 15% superiores al junio anterior, marcados por la subida de la palma, la soja y la canola.
Trigo y arroz
El precio de los cereales descendió debido a un aumento sostenido en su producción
El descenso en los precios de los cereales, sobre todo de trigo y arroz, se debe a un aumento sostenido en su producción. De hecho, la FAO estima que en 2025 se alcanzará un nuevo récord histórico de casi tres mil millones de toneladas.
Además de su baja mensual de 1,5%, los cereales han sido un 7% más baratos que en junio de 2024.
Los azúcares alcanzaron el mes pasado su precio más bajo desde abril de 2021, con un 15% de reducción en el último año.