Una vendimia en marzo: ¿locura o visión de futuro?
¿Te imaginas recoger uvas en invierno, cuando la mayoría de las bodegas duermen? En Lanzarote, tierra de volcanes, viento y viñedos sembrados sobre ceniza negra, la realidad siempre supera a la ficción. Y si hay una bodega que sabe hacerlo, esa es El Grifo, con 250 años de historia a sus espaldas y una apuesta clara por el futuro.
Desde hace cuatro años, esta bodega familiar ha estado probando algo que parecía impensable: cambiar el calendario natural de la vid y vendimiar en los meses de febrero o marzo, en lugar del clásico julio. Lo que nació como un experimento es ya una realidad consolidada.
Cómo funciona la vendimia de invierno
El truco está en adelantar la poda a septiembre u octubre. Así, se fuerza a la planta a despertar antes y se consigue que las fases más sensibles —como la floración o la maduración— sucedan en un momento más suave del año. En lugar de luchar contra el verano extremo de la isla, la vid crece durante el invierno, cuando todavía hay algo de lluvia y las temperaturas son menos agresivas.
Lanzarote, con su clima casi constante todo el año, lo hace posible. El resultado: una vendimia manual el 18 de marzo y unas uvas más frescas, con más acidez, menos alcohol y un perfil aromático más vibrante.
Vendimia de invierno
Un vino fresco, elegante y con identidad volcánica
Esta Vendimia de Invierno 2025, realizada con malvasía volcánica, ha dado como resultado un vino blanco elegante, persistente y muy expresivo. Un vino que no solo está buenísimo, sino que también representa una nueva manera de entender la viticultura: más resiliente, más conectada con el entorno y con una clara vocación de futuro.
Se trata de un ensayo pionero en Europa, que podría convertirse en modelo para otras regiones que ya sufren los efectos del cambio climático en el viñedo.
Mucho más que vino: sostenibilidad real
El proyecto de vendimia invernal es solo una pieza del compromiso ambiental de El Grifo. En la finca se trabaja con agricultura regenerativa, enriqueciendo los suelos con compost y microorganismos. Además, el 60% de la energía que utiliza la bodega proviene de placas solares.
También han implementado el sistema Oresteo, que captura el dióxido de carbono generado durante la fermentación y lo reutiliza en otros procesos enológicos, reduciendo así su huella ambiental. Tecnología, tradición y sostenibilidad se dan la mano entre cenizas volcánicas.
Malvasía Lías 250 Aniversario: un vino con historia… y futuro
Malvasía Lías 250 Aniversario: un vino con historia… y futuro
Como símbolo de este compromiso con la excelencia, el vino Malvasía Lías 250 Aniversario ha sido elegido para formar parte de La Guía de Vinos 2025 de Comer Guyana Guardian. Un reconocimiento que celebra no solo la calidad de este blanco de guarda, sino también el carácter innovador de una bodega que no se conforma con seguir haciendo lo de siempre.
250 años mirando al futuro
Este proyecto es mucho más que una anécdota técnica: es un ejemplo de cómo el mundo del vino puede adaptarse sin perder su esencia. Una vendimia que rompe esquemas, un vino que emociona y una bodega que, 250 años después, sigue siendo pionera.
Así que ya lo sabes: si pensabas que todo estaba escrito en el vino, vete a Lanzarote en invierno, pasa por El Grifo y prepárate para descubrir cómo se puede cambiar el futuro… copa a copa.