Pocas cosas son más apetecibles que una proteína frita acompañada una salsa algo picante. Esta receta es una versión muy mediterránea, con costillitas de conejo crujientes y una salsa de tomate brava tan fácil como sabrosa. Puedes completar la experiencia con una cañita o una copa de tu vino blanco favorito, siempre y cuando no te la acabes mientras cocinas.
Costillas de conejo con salsa de tomate brava
Ingredientes
Para las costillas
500 gr. de costillas de conejo
1 huevo
Panko o pan rallado
Para salsa brava
400 gr. de tomate pelado y troceado
1 diente de ajo
1 cebolla pequeña
½ pimiento rojo mediano
50 ml. de vino blanco seco
1 cc. de copos de chile
1 cc. de pimentón de la vera
1 hoja de laurel
Romero y tomillo fresco
Aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta negra recién molida

Ingredientes para las costillas de conejo con salsa de tomate brava
Elaboración
1. Pela y lamina el ajo. Ponlo en una cazuela baja con un poco de aceite de oliva y enciende el fuego (así aromatizamos un poco el aceite partiendo de frío). Añade la cebolla y el pimiento cortado en juliana y sofríe hasta que se ablande. Vierte el vino y deja reducir.
2. Incorpora el tomate, junto con el pimentón, los copos de chile, las aromáticas, baja el fuego y deja sofreír durante 20’. Prueba y corrige de sazón.
3.Mientras, salpimienta las costillas de conejo. Pásalas por huevo batido y posteriormente por el panko o pan rallado.
4. Fríelas en abundante aceite caliente a unos 160-180º hasta que estén doradas. Retira y deja reposar unos instantes sobre papel absorbente.
5. Sirve las costillitas con la salsa de tomate brava.
Consejos
➤ Puedes triturar la salsa de tomate, para que te quede más fina. Asegúrate de retirar las aromáticas.