Proliferan en Barcelona los locales centrados en un único producto: tartas de queso horneadas al estilo vasco, empanadas, bikinis, y ahora también sandos .
La primera tienda dedicada en su totalidad a este sándwich, de origen japonés, abrió hace apenas unos meses en el número 16 de la calle Comerç. Se llama Sando Café Sando, y sus creadores, los argentinos Teo Lepes, Maximiliano Di Fabio y Juan Manuel Aldaco, aseguran que su idea inicial no era rendir un homenaje a Japón con su propuesta, sino a esos sanguichitos hechos con pan de miga y diversos rellenos, famosos en su país, que siempre habían tomado en su infancia.

El packaging de Sando Café Sando
“Una noche me acordé de un anime que había visto de chiquito, una imagen de un sando de fresa. Me puse a investigar y pensé: este sándwich tiene algo de argentino”, cuenta Lepes. Para seguir profundizando en el tema, el equipo de Sando Café Sando acabó viajando a Japón y, a la vuelta, después de tres intentos fallidos, consiguieron el local ideal en el Born. Este ha sido diseñado en tonos vibrantes y con una estética moderna, como si fuera una pequeña taberna japonesa, por la interiorista argentina Sol Mark.
El local ha sido diseñado en tonos vibrantes y con una estética moderna, como si fuera una pequeña taberna japonesa
En la carta ofrecen diversos sándwiches sandos , con reinterpretaciones propias. Entre ellos destacan el Tonkatsu (en el que la carne tiene un tratamiento especial, muy diferente al tradicional), el de huevo tamago, el de gambas y uno de pepino con aguacate y crema de menta. También preparan versiones dulces con frutas frescas de temporada (fresa, mango, uvas), nata y chocolate blanco. Para todos sus sándwiches usan el delicioso pan del obrador Mondo Integral, situado en el Poblenou.

La vitrina de Sando Café Sando
En la oferta de bebidas, también han querido huir de lo clásico, ya que no sirven refrescos comerciales, sino sodas caseras sin alcohol elaboradas con frutas frescas e ideadas por el bartender Fabian Leonardo Legari. “Así es como se acompañan los sandos en Japón. No podíamos hacerlo de otra manera”, cuenta Lepes.
Una colaboración puntual con el chef Kouichi Kuwabara, quien estuvo en los fogones del Dos Palillos y ahora lidera su propio restaurante – Scapar, en Sarrià–, ha dado lugar a un nuevo sándwich exclusivo de atún y caviar, aunque por ahora solo se servirá en eventos especiales. No será la única colaboración, “habrá más”, asegura Lepes, y añade que la propuesta de sandos también se irá renovando según temporada y estación.