Ser padre o madre viene acompañado de una nueva carga invisible: la presión de hacerlo perfecto. Artículos, podcasts, influencers, expertos. Todos opinan. Todos advierten. Y en medio de ese ruido constante, se instala una creencia silenciosa pero poderosa: que cualquier fallo puede dejar una huella permanente en los hijos.
Bret Samuel Weinstein es un biólogo evolutivo, autor y divulgador estadounidense. El experto ha protagonizado uno de los últimos capítulos de 'The Diary of a CEO', donde rompe con la idea de que cualquier fallo puede dejar una huella permanente en los hijos: “Vas a cometer errores. Vas a gritarles cuando no deberías. Vas a hacer todo tipo de cosas que no deberías hacer. Eso no destroza a los niños”, empieza diciendo.
Un padre jugando con su hijo.
“Tu trabajo como padre es reflejar el mundo en el que van a vivir”
La clave está en el equilibrio. Lo realmente importante no es evitar errores, sino que los aciertos superen con claridad a los fallos: “La relación señal-ruido es en lo que tienes que centrarte. En general, quieres que tus éxitos, las cosas que haces bien, superen suficientemente a las que haces mal, para que ellos capten la idea”, explica.
Un padre después de una discusión con su hijo
Los niños no actúan contra sus padres. Weinstein rompe con esta idea tan arraigada: “Su propósito no es manipularte. No es evadir tu autoridad. Están intentando entender cómo estar en el mundo. Tu trabajo como padre es reflejar el mundo en el que van a vivir, hacerlo de un modo que puedan captar el mensaje, para que puedan convertirse en lo que quieren ser”, cuenta.
Padre e hijo conversan durante una excursión
Evita la sobreprotección. El experto habla de los peligros de no preparar a nuestros hijos para las situaciones que vivirán en el futuro: “No quieres un niño que entre en pánico cuando se enfrente a un peligro. Eso no es útil. Eso te mata. Lo que quieres es alguien que, cuando se enfrente a algo difícil, sepa aplicar las herramientas adecuadas”, señala.
Aprendizaje. Weinsten nos recuerda que el aprendizaje no es instantáneo y que debe empezar con ejemplos sencillos para crecer con el tiempo: “Lo modelas para ellos. Y produces un mundo en el que existan ese tipo de desafíos, al principio de forma muy rudimentaria, y luego cada vez más sofisticada”, termina diciendo.

