La Real Academia Española (RAE) ha presentado este jueves en Madrid su programa LEIA, con el que la tricentenaria institución que vela por pulir, limpiar y dar esplendor a la lengua española culmina la exploración en el terreno de la inteligencia artificial que inició hace seis años, en el 2019.
LEIA, que son las prosaicas siglas de Lengua Española e Inteligencia Artificial -pese a las resonancias de ciencia ficción que tiene este nombre, que coincide con el de la princesa de La guerra de las galaxias-, es como la RAE ha bautizado el programa de herramientas en el que aplica la inteligencia artificial, con el que ya trabajan los lingüistas de la institución y que próximamente se abrirá a la consulta ciudadana.
El director de la RAE, Santiago Muñoz Machado, ha celebrado la inauguración de esta nueva etapa, en la que gracias a la inteligencia artificial, “que lee todo” y aprende de los textos y las voces de todos los hablantes del español, la institución podrá detectar palabras nuevas, sugerir correcciones y ofrecer respuestas a las dudas de forma prácticamente inmediata.
Se trata más de entender, a partir de los millones de conversaciones que se vuelcan en la red, que de corregir, ha señalado Muñoz Machado, para quien la RAE debe seguir escuchando y trabajando por preservar la unidad de la lengua española y fortalecer su presencia en el entorno digital.
Se trata más de entender, a partir de las conversaciones que se vuelcan en la red, que de corregir, señala Muñoz Machado
LEIA ofrecerá a todos los hablantes del español las herramientas de consulta de las que ya disponen los académicos y lingüistas de la RAE, con un observatorio de palabras que, además de ser útil para resolver cuestiones de corrección ortográfica, permitirá conocer diferentes opciones dialectales en función de la diversidad geográfica y ofrecerá más recursos de aprendizaje.
“La tecnología no es un opción, sino una necesidad, y la inteligencia artificial es una aliada indispensable para defender, proyectar y garantizar el buen uso del español en un entorno tan difícil como el digital”, ha concluido el director de la RAE, que ha agradecido el apoyo del Estado para el desarrollo del proyecto, que también se ha beneficiado de fondos europeos, como ha resaltado la directora general de Inteligencia Artificial del Ministerio para la Transformación Digital, Aleida Alcaide.
Aleida Alcaide, directora general de Inteligencia Artificial
La académica encargada de dirigir la puesta en marcha de LEIA, Asunción Gómez-Pérez, ha desgranado los usos potenciales de la herramienta, a la que se podrá acceder a través de la página web de la RAE. Entre ellos, un visor de las fichas digitalizadas con punto rojo, que permiten saber la primera documentación de la palabra; una aplicación que detectará y verificará de forma automática errores ortográficos, léxicos, sintácticos o morfológicos, u otra en la que se podrá seguir el rastro de neologismos, tecnicismos, localismos y extranjerismos.
Con todo, el sistema estará supervisado por los lingüistas de la RAE y las respuestas que dé la inteligencia artificial no se darán por definitivas, ha subrayado la directora del proyecto LEIA, que ha insistido en que esta herramienta contribuirá a que todos los hablantes sean “más respetuosos con los usos que puedan no ser coincidentes” en todo el dominio lingüístico del español.
Esta herramienta permite a los equipos de la RAE observar palabras que puede ser conveniente explicar y, posteriormente, la plataforma podrá mostrar esos términos y ofrecer información sobre su uso y los contextos en los que aparecen. Es una forma de ayudar al hablante previa a la entrada normativa, cuando se dé el caso, en los diccionarios de la institución. “Es importante señalar que la presencia de una palabra en el observatorio solo significa que ha sido detectada y que está en estudio”, previenen desde la Real Academia.
El respeto a la diversidad no estará reñido, pues, con la preocupación por la unidad lingüística del idioma, hablado por más de 600 millones de personas en todo el mundo y de cuya actividad en el entorno digital se irá nutriendo LEIA, que cada día analiza un millón de formas de muy diversa procedencia.
