La encrucijada del COI: lo de Rusia e Israel son “situaciones no comparables”

El conflicto de Oriente Medio

El organismo solo sanciona a comités olímpicos, y no a países, y en estas presiones cree que se traspasan líneas rojas

Opening Ceremony: 2014 Winter Olympics: Team Israel short track speed skater and national flag bearer Vladislav Bykanov during Parade of Nations at Fisht Olympic Stadium. Sochi, Russia 2/7/2014 CREDIT: Al Tielemans (Photo by Al Tielemans /Sports Illustrated via Getty Images) (Set Number: X157604 TK2 R1 F219 )

Año 2014, otros tiempos: la delegación de Israel desfilando en los Juegos Olímpicos de invierno de Sochi, ciudad rusa

Al Tielemans / Getty

Sin excesivos rodeos, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dijo en el Congreso de los Diputados lo siguiente: “Hasta que no cese la barbarie, ni Rusia ni Israel deben estar en ninguna competición internacional”. Unas palabras que aprueban lo sucedido en la Vuelta, donde miles de mani­festantes impidieron el final de la carrera en Madrid como protesta por la participación del Israel Premier Tech. La Unión Ciclista Internacional (UCI) acusó al Gobierno de “instrumentalizar el deporte con fines políticos” mientras en el Eurobasket de Chipre y Letonia el equipo de baloncesto israelí compitió sin ruido.

Aunque el presidente no citó al Comité Olímpico Internacional (COI), fue a este organismo al que le lanzó el dardo: “¿Por qué se expulsó a Rusia tras la invasión de Ucrania y no se expulsa a Israel tras la invasión de Gaza?”.

Efectivamente, el COI sancionó un año y ocho meses después de la invasión al Comité Olímpico Ruso (COR) –no a Rusia, ya que no tiene potestad de sancionar a países– por infringir la Carta Olímpica después de añadir a su mapa regiones que pertenecían al Comité Olímpico Ucraniano. Estos estatutos rigen las estructuras deportivas mundiales con independencia de los gobiernos y representan el marco de valores. Este principio está refrendado por varias resoluciones de las Naciones Unidas, aprobado también por España, en el que se autoriza “respetar la autonomía y la neutralidad del COI para preservar los valores del deporte y la paz”.

Lee también

El Movimiento Olímpico, liderado por el COI, es el paraguas que está por encima de las federaciones internacionales (FIFA, World Aquatics...) y de los 206 comités olímpicos nacionales (CON). Cualquier recomendación sirve de activación.

En la Carta Olímpica se especifica, como argumenta el propio COI, que sus reglas se ciñen solo a las federaciones internacionales y a los comités olímpicos nacionales, pero no a los países y a sus maneras de gobernar. Y pone ejemplos: los comités nacionales son los que participan en los Juegos Olímpicos y deben decidir su himno y su bandera. Y, obviamente, escogen los del país al que pertenecen, pero podrían optar por otros, como ocurre en diez casos. Uno es el de las Islas Vírgenes, que evitan usar el himno y la bandera británica.

La comparación entre Rusia e Israel no es apropiada para el COI. En el caso de Rusia, el primer comunicado del COI llega el 28 de febrero del 2022, cuatro días después de que empezara la invasión de Ucrania. En aquel momento, el mundo estaba en lo que se denomina la tregua olímpica (periodo que comprende unos días antes de la celebración de los Juegos hasta otros después). Los Juegos de Invierno de Beijing habían finalizado el día 20 de febrero y el día 24 empezó la ofensiva rusa. El 2 de diciembre del 2021, la Asamblea General de Naciones Unidas, por consenso de los 193 miembros de la ONU, aprobó que la tregua finalizaba el 13 de marzo. Rusia la incumplió iniciando ese conflicto.

El COI considera que el comité olímpico de Israel no vulnera la Carta Olímpica: quiere “tender puentes”

Por eso, amparándose en un organismo internacional, el COI recomendó a las federaciones internacionales borrar la referencia del país en las competiciones. El COI no tiene competencias para sancionar al país, pero sí para evitar que aparezca el nombre o suene el himno en las estructuras deportivas. Y ese comunicado activó la catarata de vetos: atletismo, natación, fútbol...

La siguiente actuación sí fue sancionadora y se produjo en octubre del 2023, cuando el Comité Olímpico Ruso (ROC), después de que se aprobara en la Duma, le comunicó al COI que anexionaba el territorio del Donbás a su jurisdicción: “La suspensión del Comité Olímpico Ruso se basa en la decisión unilateral tomada por el ROC el 5 de octubre del 2023 de anexionar y reclamar como miembros varias organizaciones deportivas regionales dentro del territorio del Comité Olímpico Nacional de Ucrania. Esto constituye una violación de la Carta Olímpica, ya que viola la integridad territorial del CON de Ucrania, reconocida por el COI”, explican fuentes próximas al COI.

Lee también

Esta decisión, recurrida por Rusia, fue ratificada por el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS): “Las referencias del ROC a los conflictos sobre el territorio de Cachemira, los conflictos sobre el territorio de Nagorno Karabaj y los conflictos en Palestina son inapropiadas. A diferencia del presente caso, los CON pertinentes no extendieron su jurisdicción más allá de la de otro CON ni más allá de su propia jurisdicción”, expuso el tribunal.

El Comité Olímpico de Israel no ha incumplido, de momento y a ojos tanto del COI como del TAS, la Carta Olímpica. “Por lo tanto, ambas situaciones no son comparables”, sentencian fuentes cercanas al Movimiento Olímpico.

Durante los últimos años, la comunicación entre el COI, Palestina e Israel ha sido continua; incluso se creó un teléfono rojo para que los deportistas palestinos de Gaza pudieran salir de la región al estar el Gobierno de Israel controlando militarmente esa zona. “Ambos CON cumplen con la Carta Olímpica. El COI sigue colaborando con ambos para mitigar el impacto del conflicto en sus atletas y brindarles apoyo. Equipos de los dos CON participaron en los recientes Juegos y sus atletas convivieron pacíficamente bajo el mismo techo en la villa”, añaden.

El COI solo sanciona a comités olímpicos, y no a países, y en estas presiones cree que se traspasan líneas rojas

El COI pretende “construir puentes” entre comités, pero no puede “juzgar a estos por lo que hacen los gobiernos de sus países”. Considera que ese no es su marco; los comités olímpicos nacionales funcionan como entes autónomos, aunque en la práctica sean percibidos como representantes de sus estados y, por lo tanto, en ocasiones pueden ser víctimas de sus circunstancias.

Esta semana, el ejecutivo del COI se encuentra en Milán ultimando los Juegos Olímpicos de invierno que tendrán lugar en apenas cuatro meses en la ciudad italiana. Es una de las reuniones trascendentales que tienen al año y, obviamente, se hablará de lo que Naciones Unidas considera un “genocidio” de Israel en Gaza (“la intención genocida era la única conclusión razonable que se podía extraer de la totalidad de las pruebas”, resolvió un comité independiente escogido por la ONU). Pero la Carta Olímpica no se ha incumplido por su comité.

El COI deja claro que se están traspasando unas líneas rojas en el papel que se le da al deporte y a sus instituciones.

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...