Acompañado de los suyos, de empleados del Espanyol, del CEO, Mao Ye y del director deportivo, Fran Garagarza, Javi Puado ha vivido su gran día en el RCDE Stadium, que también fue el de todo el españolismo después de un mes de junio agitado en el plano emocional por la marcha de Joan Garcia al FC Barcelona. “Es decisión suya y allí se queda”, explicó de forma escueta un delantero que no quiso meterse en jardines.
Renovado hasta 2030, Puado se convierte en el “capitán ideal”: criado en la ciudad deportiva de Sant Adrià y capaz de “recorrer todos los caminos” que se necesitan para llegar al primer equipo, con una cesión al Zaragoza en 2019 que fue determinante para ganar confianza. Ahora, el Espanyol se aferra a sus goles y a su liderazgo, algo que el barcelonés no rehúye y aspira a convertirse en un 'one club man'. “Ojalá, esta es mi casa”, repitió en varias ocasiones.
Puado ha ido manejando los tiempos de su renovación como un veterano, consciente de que la clave es que el Espanyol se mantuviera en Primera, algo que no ha escondido en la presentación. ”Siempre tuve claro que si se quedaba en Primera y formábamos un buen equipo y si las condiciones eran buenas me iba a quedar. Estoy a gusto, contento y después de la salvación fue un punto a favor. Llegamos a un acuerdo y muy contento”, dijo el delantero.
Y abundó en la idea y fue sincero cuando durante el curso se le relacionaba con otros equipos: “He estado tranquilo, sabía lo que era verdad y lo que era mentira. Salí a decir que no era así. No quiero engañar a la gente ni que se sienta engañada. Soy claro y franco. Si hay algo, bien, y si no, hay que decirlo. A mis agentes les decía lo importante es salvarse y a partir de ahí se hablará con todo con más tranquilidad”.
Puado ha insistido en la capacidad de “formar un buen equipo” y confía en que la próxima temporada sea la de la estabilidad. Sobre el equipo se ha referido de la siguiente manera: “El proyecto deportivo es consolidarse en Primera otra vez, que cada año sigamos en Primera, y seguir creciendo y mirar para arriba. Que esté dónde se merece estar, que demos todos el 100%, la afición estará siempre ahí. Luchar por quedar lo más arriba posible”.
E, incluso, sueña con la oportunidad de “volver a Europa”, algo que destaca como uno de los mejores momentos, hasta el 2030 en el que expira el contrato. Tampoco descarta alcanzar los 100 goles y meterse entre los cinco máximos goleadores.
Los mejores amigos de Puado compartieron sus momentos con él, también sus sobrinos que le entregaron la camiseta y dos promesas de la base que le dieron el brazalete. Incluso, demostrando el buen rollo que impera con Manolo González, el capitán bromeó sobre su renovación y el silencio del técnico: “Me felicitó. Me llevo muy bien con Manolo, no me has llamado en todo el verano, que querías que no renovase, se lo quería llevar todo él”.
La broma de Puado con Manolo González
“Me llevo bien, ya le dije que no me había llamado en todo el verano”
Sin referirse a Joan Garcia, pero preguntado sobre la especialidad de ser del Espanyol, Puado argumentó lo siguiente: “El sentimiento perico no se puede describir. Podría tirar un rollo de lo que es, pero debes vivirlo. Los que están en casa saben por lo que hemos pasado, es una ciudad en la que hay dos equipos... Los que se ponen esta camiseta saben lo que es realmente ser perico, lo que significa, con eso me quedo tranquilo. No tenemos que enseñarle a nadie que no quiera lo que es el Espanyol”. Finiquitó el capitán ideal.