Con su mejor marca personal, el récord de España que batió recientemente (58s83), Carmen Weiler hubiera pasado quinta a la final de los 100 espalda en los Mundiales de Singapur. Si hubiera nadado, incluso, medio segundo más lento que esa marca, también habría pasado el corte, por los pelos, pero España podría tener este martes la primera de las finales a las que aspiraba para salir de Singapur con alguna recompensa.
Pero la nadadora que ha crecido en Singapur y se entrena en Estados Unidos se ha quedado en 59s92 y ha acabado decimosegunda. Ella misma, explicaba tras acabar la amarga prueba a La Vanguardia que “el segundo 50 me costó bastante. Me quedan dos, el 50 y el 200, y tengo que ir a por eso. A recuperar, descansar y a ver que sale... El 50 me salió muy bien en Mallorca, es el siguiente que tengo, podrían caer las dos finales”, explicó.
Con Carmen, ya se han estrenado 11 nadadores en pruebas individuales y solamente Sergio de Celis, en la primera posta del relevo 4x100 libre, ha conseguido mejorar su marca. El nadador del CN Sabadell hizo 48.24 para batir el récord de España. Luca Hoek también mostró un gran nivel al nadar su posta lanzada en 47 segundos.
Emma Carrasco, que llegaba con la intención de pelear por entrar en la final de los 200 estilos, finalmente no logró bajar de 2:12. El año pasado, a estas alturas, hizo 2m11s54 para entrar en las semifinales de los Juegos Olímpicos. Ahora ha estado un segundo más lenta. Todavía le quedan los 400 estilos y los 200 braza. Un caso parecido al de Weiler, que en París fue novena en las dos pruebas de espalda.
“El segundo 50 me costó bastante, me quedan dos pruebas, puedo las finales”
En la jornada de este lunes, Adri Santos nadó tres décimas por encima de su mejor marca y quedó 26º en los 100 espalda (54s22); Jimena Ruiz, que fue medallista de bronce en el Mundial júnior en los 100 braza con 1m07s25, quedó lejos del corte con 1m09s84; Miguel Pérez-Godoy, que ya nadó el domingo el relevo 4x100 libre, nadó los 200 libre en 1m48s46 y acabó en la posición 33.
En la primera jornada, al margen del relevo 4x100 que no logró rebajar su mejor marca y Emma Carrasco, Nil Cadevall, que se estrena en unos Mundiales, nadó en 1m00s93 los 100 braza, su segunda mejor marca de siempre. Tampoco lo logró Laura Cabanas en los 200 estilos, con un tiempo de 2m13s80.
La dirección técnica ya precisó que había dos grupos de nadadores en el equipo. Aquellos, primero, con experiencia para aspirar a mejorar sus marcas y a nadar por las tardes, como Emma Carrasco o Carmen Weiler, y los jóvenes que vivían su primera experiencia a los que no se les podía exigir.
Por el momento, no se ha mejorado marcas personales al margen de De Celis, aunque se espera que, tras los dos días de estrenos, todo mejore. El modelo español, como lleva sucediendo desde hace años, sigue en revisión, con unos trials en junio que se heredaron de la anterior dirección técnica y que se estrenaron en París 2024 y que podrían variar en caso de que se concluya de que no dan resultados. Por el momento, las marcas están siendo peores en Singapur que en Mallorca, que es donde se jugaba la clasificación, que aquí. Quedan aún seis jornadas emocionantes para darle la vuelta a la tortilla.
Tras dos primeras semanas de medallas, con la natación artística que trajo nueve y las dos del waterpolo, más de los saltos de gran altura de Carlos Gimeno, tantos los saltos como la natación en línea no alcanzan ese nivel. Algo esperado pese a que en los últimos Mundiales fueron dos deportes triunfadores.