La comisión ejecutiva del Banco de España ha cubierto este jueves los dos cargos vacantes al frente de sendas direcciones generales con el nombramiento de Daniel Pérez Cid como director general de Estabilidad Financiera y de Eva Valle como directora general de Relaciones Institucionales.
Junto a esto, ha designado a Susana Camiñas como directora general adjunta de Supervisión y a Galo Nuño como director general adjunto de Estabilidad Financiera.
Con estos cambios, la institución suple la salida de Ángel Estrada al frente del departamento de Estabilidad Financiera, una de las áreas clave del banco, y de Paloma Marín en la dirección de Relaciones Institucionales tras su nombramiento como vicepresidenta de la CNMV.
Una de las novedades es que por primera vez el Banco de España ha elegido los perfiles conforme a la fórmula de expresión de interés, abierta a perfiles ajenos a la institución. Recibió 60 propuestas.
De los seleccionados, Eva Valle fue responsable de la Oficina Económica de Moncloa en la etapa de Mariano Rajoy y en la actualidad desempeñaba un cargo en el Banco Mundial. Esta teco ha ejercido responsabilidades en el FMI, en el Tesoro y en la CNMV.
Galo Nuño es en cambio un ingeniero de la casa responsable hasta la fecha de la división de Política Monetaria y Mercados de Capitales de la Dirección General de Economía.
El Banco de España también ha acordado crear un grupo de trabajo para “la reflexión” sobre una nueva ley de autonomía de la institución, que espera presentar en junio del año que viene. En el grupo participan expertos en bancos centrales catedráticos.