El reciclaje industrial que impulsa la economía circular: convertir residuos peligrosos en recursos útiles
Ekologica
Desde hace más de 20 años, la empresa se dedica a gestionar airbags defectuosos y a regenerar baterías de plomo de carretillas elevadoras, reduciendo la contaminación y el impacto medioambiental

La empresa da una segunda vida a las baterías de plomo
Ante la creciente urgencia de la sostenibilidad, Ekologica se erige como un bastión del reciclaje industrial. Lo que comenzó hace más de veinte años como una respuesta a la necesidad de gestionar adecuadamente los airbags defectuosos, cuyo componente químico resulta altamente nocivo para el medioambiente, ha evolucionado hasta abarcar la regeneración de baterías de plomo de carretillas elevadoras, dándoles una segunda vida útil. Silvia Alba, responsable de operaciones de la compañía, subraya la importancia del reciclaje responsable para preservar las materias primas y alerta sobre la escasez de gestores especializados en baterías de litio, la nueva apuesta de la casa.
Compromiso con la economía circular
Esta evolución refleja el compromiso de la empresa con la economía circular, un modelo que busca maximizar el aprovechamiento de los recursos y minimizar los residuos. En el caso de los airbags, Ekologica ha desarrollado un proceso patentado para realizar un explosionado controlado, neutralizando así el componente químico peligroso. Pero su visión va más allá: “Intentamos que todos los componentes que vienen de estos airbags se reciclen. Segregamos plástico, tela, hierro, lo más limpio posible para que esto por cada parte siga reciclando”, explica Alba.

Un ejemplo destacado de esta filosofía es la transformación de la tela de los airbags en mochilas y bolsas. “Las Ekobags son un ejemplo brutal de economía circular porque al final nos entra un residuo peligroso y puede llegar a salir un producto útil”, señala la responsable de operaciones. Este proyecto ha sido galardonado recientemente con un premio en compromiso con la sostenibilidad y la innovación por parte de la Xarxa de Municipis del Baix Llobregat.
Segunda vida a las baterías de plomo
Pero la apuesta por la circularidad no se detiene ahí. Ekologica también se ha adentrado en la regeneración de baterías de plomo de carretillas elevadoras, una iniciativa que no solo reduce el impacto ambiental, sino que también genera beneficios económicos para sus clientes. “Nosotros no recuperamos la batería, nosotros la regeneramos, con un proceso único y le damos una garantía de dos años. Durante dos años te funcionará el 80% del total”, afirma Alba. Esta segunda vida de las baterías se traduce en un ahorro significativo para las empresas, al tiempo que se evita la extracción de nuevas materias primas.
La compañía certifica este impacto a sus clientes, cuantificando el ahorro de CO2 y el equivalente en árboles plantados. “A nivel de sostenibilidad, muchas empresas necesitan acreditar sus acciones y nosotros generamos toda la documentación pertinente para que el cliente la tenga al alcance de un click en nuestra app Ekogest”, apunta Alba, subrayando la importancia de este reconocimiento tangible.

Mirando hacia el futuro, Ekologica tiene puesta la mirada en las baterías de litio, una tecnología en auge pero con escasez de gestores especializados. Aunque todavía en fase de desarrollo, la empresa ya se posiciona como un actor clave en este ámbito. “Somos gestores de baterías de litio: realizamos todo el proceso de principio a fin, desde la recogida y el transporte seguro hasta la valorización o eliminación, con un enfoque 100% alineado con la normativa actual. Con nuestra herramienta EKOGEST garantizamos el cumplimiento y la trazabilidad”, afirma Alba, anticipando el potencial de esta nueva línea de negocio.
Pero más allá de las iniciativas individuales, la responsable de operaciones hace un llamado a las instituciones públicas para que respalden estos esfuerzos. “El Gobierno o la Unión Europea te marca una agenda, pero no te da recursos para cumplir esta agenda”, lamenta. En su opinión, es necesario que estas entidades no solo establezcan objetivos, sino que también proporcionen los medios para alcanzarlos.

En un contexto donde la sostenibilidad ha pasado de ser una opción a una necesidad, empresas como Ekologica marcan el camino a seguir. Su trayectoria demuestra que el reciclaje industrial no solo es posible, sino que también puede ser rentable y generar un impacto positivo en el medioambiente. Un ejemplo a seguir en un mundo que clama por soluciones sostenibles.
Lecciones de Vanguardia
Silvia Alba, responsable de operaciones de Ekologica
“La transformación real solo es posible cuando combinas la responsabilidad ambiental con la rentabilidad económica. El éxito no llega de la noche a la mañana: hace falta constancia, capacidad de adaptación y una mirada a largo plazo. Cuando entiendes que cada reto es una oportunidad para innovar y aportar valor, es cuando el proyecto crece de verdad”.
