En lo alto de Beverly Hills, lugar preferido de las estrellas no solo norteamericanas, se encuentra la urbanización privada Beverly Park. Y allí han encontrado Justin Bieber y Hailey Baldwin el capricho más caro de su historia de amor: una mansión de 24 millones de euros, según adelanta Variety. Allí tendrán como vecinos a Denzel Washington, Samuel L. Jackson, Mark Wahlberg, Sylvester Stallone y a dos miembros de la realeza árabe. La pareja compró otro lujoso inmueble hace año y medio, también en Beverly Hills, por 7,12 millones de euros.

Vista frontal del soberbio inmueble.

Ante la mansión, una considerable extensión de césped bien cuidado.

El porche, con chimenea por si refresca durante las fiestas exteriores.
El terreno se extiende por 10.000 m2 y la mansión abarca otros mil para incluir siete dormitorios y diez baños completos y la mayoría de complementos que el dinero puede pagar: vestíbulo de dos pisos con suelo de piedra, escalera en curva, cocina con isla y electrodomésticos de diseño, una suite principal con sala de estar y paredes de suelo a techo, spa con lámpara de araña, gimnasio, sala de cine insonorizada… En el exterior también se nota el dispendio, desde la cancha de tenis a la piscina infinity con porche para cocinar y chimenea.

El vestíbulo, de dos estratos, con escalera en curva y suelo de tablero de ajedrez.

El inmueble goza de gran luz natural.

Vista de una de las salas de estar.

El exquisito baño semeja una confitería finlandesa.
Construida a finales de los 80, su última venta se cerró en 2015 por 13 y el nuevo propietario –un promotor inmobiliario– empleó una cantidad ingente de dinero en remodelarla. Así, se atrevió a pedir 35 millones por ella. Tras reducir el precio varias veces y cambiar de agente de bienes raíces, encontró a esta pareja interesada.
Aunque casi diez años Justin Bieber prefirió pagar altos alquileres –siempre alrededor de Los Ángeles– que invertir en bienes raíces. En 2012 se decidió a comprar una casa de estilo toscano en el municipio de moda, Calabasas. Tuvo ciertos altercados con los vecinos y acabó vendiéndosela a Khloe Kardashian dos años después.

La mansión consta de un gimnasio completo.

La cancha de tenis.
Después dio tumbos buscando algo que le gustase por Brentwood, Encino, Thousand Oaks, Pasadena y Bradbury Estates. No fue hasta hace año y medio, ya con Hailey a su lado, en que decidió echar raíces por fin y adquirir una mansión en Benedict Canyon por la que pagaron 7,12 millones. Era un ensayo de lo que estaba por venir.