Tras publicar unas imágenes en las que aparecía visiblemente magullada tras un accidente automovilístico y asegurar que le quedaban cuatro días de vida, Virginia Giuffre, víctima de la red de tráfico sexual de Jeffrey Epstein, ha denunciado públicamente los abusos que sufrió a manos de su marido Robert Giuffre.
“Pude luchar contra Ghislaine Maxwell y Jeffrey Epstein, quienes abusaron de mí y traficaron conmigo. Pero no pude escapar de la violencia doméstica en mi matrimonio hasta hace poco. Después de la última agresión física de mi marido, ya no puedo quedarme en silencio”, ha asegurado a la revista People.
Desde hacía 22 años, Virginia estaba casada con Robert Giuffre, instructor de artes marciales con quien había tenido tres hijos, que ya son adolescentes y de los que, al parecer, él tiene la custodia completa. “Mis preciosos bebés no tienen ni idea de cuánto les quiero y están siendo envenenados con mentiras”, escribía en una publicación de Instagram el pasado 22 de marzo. Supuestamente se separaron en agosto de 2023.
Estas acusaciones llegan una semana después de que la víctima de Epstein publicara unas fotografías donde aparecía visiblemente magullada tras ser atropellada por un autobús escolar a 110 kilómetros por hora. En la publicación aseguró que sufría insuficiencia renal, que le quedaban solo cuatro días de vida, y que estaba “lista para marcharme”.
En el 2021, Giuffre se coló en todos los titulares de la prensa internacional cuando aseguró en una demanda civil que Jeffrey Epstein la obligó a mantener relaciones sexuales con el príncipe Andrés, el tercer hijo de la reina Isabel II de Inglaterra, en al menos tres ocasiones cuando ella tenía 17 años a cambio de 15.000 dólares. Su denuncia incluía una foto del príncipe Andrés abrazando a Giuffre mientras Maxwell, expareja de Epstein, sonríe a la cámara desde el fondo de la imagen. El príncipe Andrés, duque de York, siempre ha negado esas acusaciones y defendía firmemente su inocencia, pero en ese momento se propició para no eclipsar el jubileo de platino de Isabel II.
Un portavoz de Virginia confirmó a People que ella denunció un asalto el 9 de enero de 2025 en Dunsborough, Australia, a la policía, pero que no acusó a Robert de ningún delito. Su hermano, Sky Roberts, y su mujer Amanda, han corroborado la versión de Virginia alegando que ha roto su silencio debido a la gravedad de las lesiones. “Creo que en el último incidente que tuvieron, ella casi muere”, aseguró Amanda refiriéndose a esa supuesta pelea que ocurrió en enero.
Sky Roberts y Amanda señalaron que no saben si todas esas magulladuras y problemas de salud que ha sufrido Virginia fueron causados por el accidente automovilístico o si fueron propiciados por una paliza del que fuera su marido. “Seamos claros, ella nunca declaró en el accidente de autobús la causa de todas sus otras lesiones”, dijo Sky. “Creo que el accidente le ha podido salvar la vida. Podría haber sido una bendición disfrazada”.