“Hago deporte noventa minutos seis días a la semana”, señaló Mar Flores en sus historias de Instagram el pasado 2024 cuando una de sus seguidoras le preguntaba por su constancia a la hora de ejercitarse para mantener el cuerpo en forma. Una demostración más de que, a sus 55 años, la modelo y empresaria no tiene intención ninguna de renunciar a su propio cuidado, pero siempre con la idea presente de que para lograrlo debe trabajar duro.
Es por eso que, más allá de sus apariciones en la televisión u otros proyectos profesionales, la madrileña siempre hace todo lo posible para sacar el tiempo que entrenar requiere. De ahí esa frecuencia, casi diaria, en lo que al deporte se refiere. Algo que plasma con frecuencia en sus redes sociales, donde comparte vídeos siguiendo sus rutinas, así como también ha hecho referencias al respecto en entrevistas con la prensa.
Nunca lo ha dejado
Mar ha adaptado sus rutinas de deporte a su edad y sus necesidades
Para muestra, la charla que la madre de Carlo Costanzia tuvo con ¡Hola! el pasado 2023, en la que se abrió acerca de muchos asuntos ligados con su rutina “para estar perfecta”, como lo definían desde el propio medio. Una conversación con los periodistas en la que, de nuevo, Mar evidenció cuanta importancia da al fitness, así como descubrió algunas particularidades sobre el modo en el que lo integra en su día a día.
Tanto que incluso “he seguido haciendo deporte mientras estaba embarazada”. A fin de cuentas, la exconcursante de El desafío es madre por partida quíntuple, con todo lo que eso supone. Sin embargo, y siendo consciente de la excepcionalidad de la situación, siempre “he mantenido mi rutina de yoga, pilates o lo que estuviera haciendo en ese momento hasta que el médico me lo permitía”. Incluso después del nacimiento de sus hijos mellizos, cuando “tardé más de dos años en volver a recuperar la musculatura (…), pero lo conseguí”.
Mar en uno de sus vídeos de entrenamiento en redes sociales.
No obstante, la que fuera presentadora de VIP Noche admitía en las declaraciones a la publicación mencionada que, con el paso del tiempo, “obviamente mi rutina de entrenamiento ha cambiado”. Ya antes de cumplir 55 años señalaba que “antes hacía deportes más cardiovasculares y ahora me centro más en entrenamientos localizados”. Así procede “para mejorar las partes del cuerpo que necesito”, con pesos y el apoyo de un entrenador personal, y reconociendo que aunque cuidarse pueda costar más con la edad, “he ganado en disciplina y experiencia”.
“Con inteligencia”
Es consciente de la importancia del físico en su profesión
Podría extraerse de lo anterior que una de las motivaciones de Mar para dedicarse al culto al cuerpo va ligada con su profesión. Al fin y al cabo, incluso ella misma reconocía a la citada revista que en el mundo de las modelos y las actrices “es verdad que el físico es muy importante, es mucha presión”. Sea como fuere, desde su prisma, “creo que lo he gestionado con inteligencia”.
En Instagram, Mar comparte sus rutinas de ejercicio.
Porque sí, en la mayoría de supuestos, “para seguir estando activa en este mundo hay que estar siempre perfecta”. La eterna batalla por alcanzar la perfección, que no es poca cosa. Ahora bien, la hermana de Marián Flores asegura que “no lo tomo como una carga”. Por contra, “lo tomo como una superación personal”. El impulso necesario para dar siempre la mejor versión de sí misma, que es “la única forma en la que se puede tomar”.