En los últimos tiempos, Antonio Orozco ha atravesado problemas personales que llevaron al cantante a estar sumido en una gran depresión. Por todo ello, el artista español decidió interrumpir su carrera musical durante un periodo determinado.
Tras siete años publicando álbumes y ofreciendo giras a sus seguidores, el vocalista dijo basta. Orozco estaba pasando por un periodo de “colapso”, por ende, un equipo médico le recomendó un tratamiento psicológico, combinado con deporte y una buena alimentación para recuperarse.
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Sus mayores heridas emocionales fueron ocasionadas por la pérdida de Susana Prat, la progenitora de su hijo, que falleció en el año 2017. Aunque, en ese momento, ya estaban separados, el Orozco ha reflexionado en Los 40 sobre la buena relación que tenían. “Era la mejor persona y mi mejor amiga”.
Además, el cantante se ha sincerado sobre el duro revés que le supuso su fallecimiento. ”Cuando la perdí, no solo perdí a la madre de mi hijo, perdí el horizonte, lo perdí todo”, ha afirmado.
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Según ha relatado, una de las cosas que más le costo al compositor, fue cuando tuvo que lidiar con la pérdida de su expareja. “Acostumbrarme a que no sonara el teléfono, puesto que solo recibía llamadas de ella”, ha señalado.
No obstante, Orozco ha expresado que, “aunque no esté físicamente, el legado de Susana le ha llevado a educar a su hijo cómo ella querría”.