El príncipe Enrique parece que está dispuesto a acercarse a su padre y a su hermano tras el Megxit que protagonizó hace cinco años y que vino acompañado de una entrevista de los duques de Sussex con Oprah Winfrey en la que hablaron de racismo e insensibilidad en la casa real británica, por no hablar de la publicación del libro de memorias En la sombra que revela lo nunca contado sobre su padre, hermano y cuñada. El resto, que no es poco, puede considerarse minucias.
Pero lo cierto es que el duque de Sussex ya anunció en la última entrevista que concedió a la BBC que quiere acercarse otra vez a su padre y estaría preparando el primer paso invitando al rey Carlos III y a su hermano el príncipe de Gales a los juegos Invictus que él organiza y cuya siguiente edición se celebrará en tierras inglesas. Concretamente, en Birmingham en el año 2027.
Según ha revelado el periódico británico Mail on Sunday, el príncipe Enrique enviaría la invitación con tanta anticipación para adecuarse al sistema de trabajo de su padre, que organiza su agenda con mucha antelación. El medio considera que la acción del príncipe es como una “una rama de olivo que podría ser correspondida” para propiciar un encuentro familiar y empezar a limar asperezas.

El príncipe Guillermo con su hermano en una imagen que hace años que no se repite
Ahora bien, también destaca que aunque Carlos III desea recuperar a su hijo menor y poder relacionarse con sus nietos Archie y Lilibet, ni él ni muchos miembros de la familia real confían con el duque de Sussex debido a sus indiscreciones.
Los juegos, además, que se celebrarán del 10 al 17 de julio, coinciden con los actos que seguramente se organizarán para festejar el 80 aniversario de la reina Camila, que cumple años precisamente el último día del evento deportivo.
Otro aspecto delicado es si Enrique viajará con sus hijos y su mujer Meghan Markle a Inglaterra para los Invictus, ya que perdió el litigio que mantenía con el gobierno británico para que le proporcionara protección total a su familia.