El nuevo documental de Kanye West —hoy Ye— llega con un tráiler de apenas un minuto que ya ha encendido el debate. Dirigido por Nico Ballesteros tras seis años de grabaciones, In Whose Name? intercala imágenes íntimas, momentos de archivo y escenas cargadas de tensión. El avance se abre con la voz del rapero confesando: “Llevo cinco meses sin tomar mi medicación”, antes de desarrollar su alegato contra los fármacos, que —asegura— asfixian su capacidad creativa.
Un retrato íntimo y sin filtros
West, que en 2018 habló de su trastorno bipolar, afirma ahora que fue diagnosticado con autismo en 2025
La pieza incluye un momento especialmente tenso con su exesposa. “Tu personalidad no era así hace unos años”, le dice Kim Kardashian con la voz quebrada.. Cuando ella intenta templar la conversación —“Podemos hablar de eso después, pero…”—, él la corta: “¡No hay peros!”. En otra secuencia, West estalla: “No vuelvas a decirme que un día voy a despertarme y no tendré nada”.
El alegato sobre su salud mental es explícito. “Prefiero estar muerto antes que estar medicado. O ellos me destruyen o yo lo destruyo”, afirma en el tráiler, antes de insistir en el efecto que, a su juicio, tienen los fármacos sobre la creatividad: “Están matando nuestra capacidad de pensar fuera de la caja”. Y remata con una declaración de principios ligada a su diagnóstico: “¿Sabes lo mejor de ser artista y bipolar? Cualquier cosa que haces y dices es una obra de arte”.
Prefiero estar muerto antes que estar medicado”
El avance evita entrar en sus episodios de odio público, aunque sí intercala imágenes de su campaña presidencial de 2020 —incluido el mitin de Carolina del Sur en el que dijo que él y Kardashian casi abortan a su hija North— y escenas de su día a día con sus hijos y con la marca Yeezy.
En paralelo, el contexto reciente pesa: West fue desvinculado por su agente en febrero tras nuevos exabruptos antisemitas; en 2018 ya había hablado de vivir con trastorno bipolar, y en febrero de 2025 aseguró haber sido diagnosticado con autismo y “mal diagnosticado” de bipolaridad. Kardashian, en 2020, pidió compasión por su estado en medio de una cascada de tuits y, en febrero de 2021, solicitó el divorcio.
In Whose Name? está dirigida por Nico Ballesteros, quien filmó a West durante seis años. Según la producción, la película busca un retrato “sin filtros” y sin conclusiones cerradas, dejando que el espectador interprete. El estreno en cines de EE. UU. está previsto para el 19 de septiembre, con distribución en unas 1.000 pantallas.
El tráiler no ofrece respuestas; expone un conflicto. La defensa de West —renunciar a la medicación para preservar su impulso creativo— choca con la preocupación de quien mejor le conoce. Esa fricción sostiene el interés del documental: el artista que reivindica su libertad mental frente a los fármacos y la familia que, entre lágrimas, teme el coste de esa decisión.