Este martes, 16 de septiembre, Samanta Villar cumplirá medio siglo. Cuando tenía 40 años, la periodista dio a luz a sus mellizos, Violeta y Damià, tras más de 24 horas de parto. Ella quería ser madre y tuvo que recurrir a tratamientos de fecundación asistida para quedarse embarazada, ya que tenía una baja reserva ovárica.
La periodista mostró todo el proceso de gestación en 9 meses con Samanta, pero recibió muchas críticas por lo que dijo sobre la maternidad: “Mi vida no es mejor desde que tengo hijos”. Los primeros años fueron muy duros para ella, ya que los dos bebés dependían de ella todo el rato. Ahora, eso ha cambiado porque Violeta y Damià ya tienen 9 años.
Recientemente, Samanta Villar ha hablado sobre la maternidad en el programa Madres desde el corazón y también ha revelado que sufrió un aborto. “Como no sabía si podría quedarme embarazada, inicié los trámites para adoptar. Estaba dispuesta a explorar todos los caminos posibles para ser madre y ya pensé que mis hijos no serían míos”, explica.
Primero de todo, su pareja y ella intentaron hacer una fecundación in vitro con sus óvulos, pero no fue bien. Entonces decidieron ir a una clínica de donación de óvulos y lo intentaron tres veces durante cinco años. Finalmente, se quedó embarazada de mellizos. “Los tres primeros meses tuve náuseas cada día”, relata la periodista.
Los tres primeros meses de embarazo tuve náuseas cada día
Villar tuvo un parto natural, pero duró muchas horas. Primero nació su hija y después su hijo. “El niño fue más complicado [...] Tenía un nudo en el cordón umbilical que podría haber sido mortal, pero no”, escribió en sus redes. Ella siempre recordará que el primer año de vida de sus hijos fue el más difícil de su vida.
“Lo mejor de tu vida también puede ser vivir sin hijos y este relato no se hace nunca. Se tiene que entender que somos mujeres aparte de ser madres y que tenemos una identidad propia. A veces tengo ganas de estar sola y eso no significa que quiera menos a mis hijos. Las responsabilidades se tienen que compartir con todos los miembros de la familia”, comenta Samanta.

Violeta y Damià, los hijos de Samanta Villar, cuando nacieron.
Samanta Villar, madre por ovodonación
La ley española marca que la donación de óvulos tiene que ser anónima y la periodista reivindica poder conocer a la mujer que le dio sus óvulos: “Mis hijos y yo no conoceremos nunca la identidad de esta persona, excepto si ellos sufren una enfermedad grave. Lo que me preocupa es que a mis hijos se les niega el derecho a conocer sus orígenes genéticos. Eso es grave porque forma parte de la identidad de cada uno”.
Samanta, sin embargo, hace un gran papel como madre y está orgullosa de sus mellizos: “Mis hijos son dos niños maravillosos. Son listos, discurren, son capaces de argumentar y despiertan mi total admiración”. Además, piensa que está viviendo la vida que le hubiera gustado vivir a sus abuelas: “A ellas les habría encantado dedicarse a aquello que yo me dedico, viajar por todo el mundo, mi libertad y mi independencia”.