Habían sonado ya las campanas del ángelus cuando Secun de la Rosa, Ondas por la película Superstar (Nacho Vigalondo), se situaba en la terraza frente al palacete Albéniz de Montjuic tratando de divisar su barrio. “Soy de Nou Barris, un lugar humilde”, señaló en al menos dos entrevistas, esta incluida. Por eso su respuesta al reconocimiento que hoy recibe no podía ser otra: “No me lo esperaba: no suelo ser una persona que siempre esté en las ternas de los premios, sé que se ha valorado muy trabajo, pero vivía un poco como más en mi mundo, ha sido muy emocionante. Además de dedicarle el premio a todo el equipo de Superstar, me reservaré un momentillo para para mi gente y para mi infancia: aunque me fui hace ya mucho tiempo, soy de Canyelles, un barrio humilde de un distrito humilde, Nou Barris”.
En el discurso reservaré un momentillo para para mi gente y para mi infancia: soy de Canyelles, un barrio humilde de un distrito humilde, Nou Barris
Secun recibe el galardón por su interpretación de Leonardo Dantés en Superstar (de Nacho Vigalondo), cantautor que junto a Tamara, Tony Genil, Loli Álvarez y otros, alcanzó la fama a finales de los 90 desde el trampolín de Crónicas Marcianas. Durante unos meses estabas en el altar y a continuación, en la mazmorra. Ha empatizado con su personaje de un modo entrañable:
“Recuerdo el momento en que en televisión le quitaron la peluca para pasársela entre el público y se burlaron de él. Tuvo que ser muy doloroso. Lo conocí, hablamos: Leonardo es hoy un señor de 70 años que ha encontrado la paz en su pueblo, en Badajoz, alguien que hace sus poesías y da clases. Conozco más casos al revés, de gente que con 20, 30 o 40 años eran los tops, que brillaban mucho, y en la madurez se han se han vuelto unos negacionistas de sí mismos. Él luchó muchísimo por encontrar su sitio y no podemos juzgarlo por aquel momento determinado: venía de componer, de escribir, de haber sido cantautor, de luchar. Creo que sentía que no podía volver al pueblo con una mano delante y detrás después de 30 años de lucha”.
Me emociona que mi hija sea sensible a temas humanos tales como la causa de las personas desparecidas
Paco Lobatón, a su llegada al palacete Albéniz de Monjuic.
Paco Lobatón está feliz por partida doble: coincidiendo con el día en que recibe su Ondas de Honor, el portal Vanitatis ha publicado una entrevista realizada por su hija y si ya conocíamos al periodista, ahora sabemos mucho mejor cómo es el Lobatón padre: “Me emociona, sobre todo, que sea sensible a los temas humanos tales como la causa de las personas desparecidas, que me ha movilizado desde los años 90 y me sigue movilizando. Es una situación singular, no fácil, porque hay que conservar el pudor y sentido de la privacidad, que en nuestra familia siempre ha estado por encima de cualquier otro comportamiento”.
Señala Paco que en la actualidad, pese a que ninguna cadena haya abordado el tema como él hizo en Quién sabe dónde –programa que resolvía un 70 % de los casos que se planteaban–, el número de desaparecidos en nuestro país es equiparable al de los años de. Tal vez más, incluso. “La ventaja de que gracias a la lucha del movimiento asociativo y de las familias, ahora hay registros. En aquellos años, no había. Existe desde 2017 y, desde 2018, un centro nacional de desaparecidos. Cada año hay de 25 a 30.000 denuncias y aunque la mayoría se resuelven, queda un remanente sin resolver que causa muchísimo sufrimiento”.
Servicio público
Le impactaron, sobre todo, el caso de las niñas de Alcàsser y el de Anabel Segura, cuyo programa especial proporcionó la pista definitiva a la Policía
Paco Lobatón se convirtió en el emblema de '¿Quién sabe dónde?'.
Paco Lobatón, que sigue en su lucha desde el programa Directo al grano (TVE), cada jueves y viernes hacia las 17:30, cuenta que los casos que más le impactaron fueron las niñas de Alcàsser, el de Anabel Segura, cuyo programa especial proporcionó la pista definitiva que la Policía necesitaba para para dar con sus secuestradores y asesinos a la postre. “Esa experiencia fue durísima para mí, pero creo que revalidó que la televisión pública, en realidad cualquier televisión, puede y debe ayudar a resolver situaciones tan complicadas y dolorosas”.
‘Furia’ trata sobre cinco mujeres de edad madura que se niegan solamente a sobrevivir
Nathalie Poza, Carmen Machi y Claudia Salas son protagonistas de la serie 'Furia'.
Es el segundo Ondas consecutivo de Carmen Machi, que se mueve por el exterior del palacete Albéniz como si fuera su casa. La acompañan Nathalie Poza y Claudia Salas en representación del increíble elenco de Furia (HBO Max), la serie dirigida por Félix Sabroso que todo el mundo ha puesto por las nubes. Y con razón. “Ehhhm… Me da muchísima vergüenza decir que la serie se lo merecía (risas). Lo que estamos es muy agradecidas y que todas las compañeras estemos en el mismo plano como mejor actriz; me parece el premio de los premios”. Nathalie Poza nos explica el argumento de Furia: “Son cinco mujeres de edad madura que se niegan solamente a sobrevivir y cada historia retrata realidades que nos resuenan a todos. Yo creo que por eso nos ha tocado mucho tanto a nosotras como a los espectadores. El mundo está muy difícil, la vida resulta insoportable y se trata de una buena ficción con la inteligencia, sensibilidad, y humor –mérito de Félix– con personajes femeninos tan potentes”.
Desde que tengo conciencia de querer ser actriz pensaba en qué espejos mirarme y es que están todas ellas”
En efecto, en Furia se aborda la traición y la infidelidad pero también el problema de la vivienda y el trabajo precario. Para Claudia Salas esta serie ha sido una experiencia muy enriquecedora: ¿Cómo se lo tomó? ¿Un desafío para estar a la altura de compañeras con premios Goya, Forqué, Feroz y otros o como una escuela impagable? “La segunda opción, siempre. Creo que la primera es un poco tóxica, de hecho. Trabajar con esa presión y con la comparación es a veces es inevitable por intentar estar a la altura de lo que ellas te están dando. Para mí ha sido un regalo y un placer porque son referentes: desde que tengo conciencia de querer ser actriz pensaba en qué espejos mirarme y es que están todas ellas”.
El actor Miguel Bernardeau en una escena de la serie “Querer”.
‘Querer’ aborda el maltrato continuado a la mujer dentro del matrimonio, asunto del que no se habla tanto
Miguel Bernardeau celebra haber participado en la aclamada serie Querer y valora el reto de enfrentar un trabajo con fuerte trasfondo social: “Aborda un tema tan relevante como el del maltrato a la mujer, maltrato continuado dentro del matrimonio, asunto del que no se habla tanto. He sentido mucha motivación al tratar de contar esta historia de la forma más verídica o humana posible. Sí, hay un compromiso con eso”. Hoy mismo, Diez Minutos ha salido al kiosco con su ex, Aitana, junto a su actual pareja, el youtuber Plex. Le preguntamos de refilón si alguna portada de revista le ha molestado últimamente. “No”, responde el actor oliendo perfectamente por dónde íbamos.
Pastora Soler
Me he caído, me he levantado y me he conocido. Tiré la toalla, como bien sabéis, pero ese autoconocimiento es muy importante para esa profesión
Pastora soler recibe el premio que merece por una trayectoria inmaculada. Decidió retirarse un tiempo por salud mental y volvió con tanta fuerza o más que antes. Hace de eso ocho años. Preguntada por quién ha sido la persona o vivencia que más le ha enseñado se decanta por esta segunda. “Una aprende muchísimo de sí mismo. Yo he tenido tantas cosas en el camino… me he caído, me he levantado y me he conocido. Tiré la toalla, como bien sabéis, pero ese autoconocimiento es muy importante para esa profesión y me ha hecho eh crecer, aprender y evolucionar. Por supuesto, en mi carrera hay muchas figuras importantes que me han enseñado, pero si me debo quedar con alguien, aunque suene así un poquito ¿raro? De mí misma”.
Leticia Dolera. )
Los niños y niñas no son propiedad privada de los padres
Leticia Dolera no vislumbraba el éxito que llegaría a alcanzar la serie Pubertad, de la que es directora. “No, no, nunca sabes. Cuando estás currando solo piensas en llegar al corazón de la historia. Ese es el primer éxito. El segundo es llegar al corazón de la gente. Y si después te dan premios ya es una fiesta (risas). Me llegan mensajes muy bonitos de familias que están viendo la serie en casa y hablando con sus hijos e hijas, abriendo conversaciones incómodas pero necesarias”. Esta es su reflexión: “Los niños y niñas no son propiedad privada de los padres. Creo que son responsabilidad de toda la manada adulta: entendiendo la humanidad como una manada, deberíamos sentir que todos los niños, toda la infancia y la adolescencia nos interpela de manera era sensible y responsable”. La actriz y directora ya se ha embarcado en un nuevo proyecto del que no suelta prenda. Ahora mismo solo necesita descansar: “Tengo que hacer vacaciones pero no irme a ningún sitio, sino pasear, leer o ver cine”.
El gran Wyoming
La desvergüenza y las líneas rojas se han atropellado tanto que quienes lo hacen, dicen en sede parlamentaria que mentir no es delito
El Gran Wyoming, Ondas por el programa El intermedio, viene combativo como nunca. La situación lo requiere. “La democracia nunca ha estado tan asediada como ahora por parte de aquellos que se autodenominan constitucionalistas y demócratas. La están derrocando a patadas”. Cree el presentador de El Intermedio que la situación es más grave que cuando la carcunda tenía como misión tumbar a Felipe González fuese como fuese. “Es peor, mucho peor, los medios de comunicación eran más sibilinos. Disimulaban un poco más; no se inventaban reuniones de Sánchez con Otegui. La desvergüenza y las líneas rojas se han atropellado tanto que quienes lo hacen, dicen en sede parlamentaria que mentir no es delito. Perdone, mentir es delito. Lo ha sido y ojalá lo sea siempre porque si no la justicia vale menos que el orín de los perros”. Con todo, sigue en la trinchera con el humor como arma contra los reaccionarios.
Wyoming,en 'El Intermedio'
Cuando la presidenta de una Comunidad Autónoma llama hijo de puta al presidente del Gobierno en el Parlamento y se pasa página...
“El mejor cine de Inglaterra de los últimos tiempos salió con la Thatcher. No hay que arrojar la toalla. Si quieren arrasar, que se lo curren. Pero hay que plantarse, porque vienen al galope, además. No hay que acostumbrarse a que pisoteen las líneas rojas porque están para algo: cuando la presidenta de una Comunidad Autónoma llama hijo de puta al presidente del Gobierno en el Parlamento y se pasa página, o que esa misma persona pueda decir en un programa de televisión que el Lehendakari la ha señalado para que la peguen un tiro en la cabeza y no pasa nada… Ahí estamos fallando todos. Es decir, esta señora no debería volver a aparecer en un medio. O se corrige y deja de mentir sistemáticamente o no vuelve más. Y esto es lo que hay que hacer. Nosotros, y este es mi orgullo, llevamos 20 años con un programa diario y nunca hemo emitido un bulo. Nos han llevado a los tribunales por gilipolleces porque no nos han cogido nunca. Y ese es el mayor orgullo que tengo”.




