Dos aviones de combate de la Fuerza Área de Corea del Sur han lanzado por error ocho bombas en una zona civil, hiriendo a 15 personas —dos de ellas de gravedad— y causando daños en varias viviendas y una iglesia.
El accidente ha tenido lugar este jueves en Pocheon, una ciudad a 50 kilómetros al norte de Seúl y próxima a la frontera con Corea del Norte, durante unas maniobras militares en las que participaban dos cazas KF-16.
Según fuentes del Ejército surcoreano, uno de los pilotos introdujo coordenadas incorrectas en el sistema de lanzamiento de proyectiles, y cada uno de los dos aviones lanzó entonces cuatro bombas MK82 que acabaron detonando fuera del área designada para los ejercicios de fuego real. Los dispositivos lanzados tienen un gran poder destructivo. Se usan habitualmente para atacar infraestructuras y tienen un radio de impacto similar al de un campo de fútbol.
“Lamentamos profundamente el lanzamiento involuntario de las bombas y deseamos una rápida recuperación a los heridos”, aseguró la Fuerza Aérea en un comunicado. Por su parte, el alcalde de Pocheon, Baeck Young-hyeun, instó al Gobierno y al Ejército a tomar medidas para evitar más accidentes similares. Desde hace años, los habitantes de la zona han protestado por el peligro potencial de los campos de entrenamiento cercanos. Hoy se han confirmado sus temores.
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Las autoridades han anunciado que suspenderán los ejercicios con fuego real hasta que concluyan sus investigaciones, aunque el incidente de hoy no afectará a las maniobras conjuntas de Corea del Sur y Estados Unidos que comenzarán el próximo lunes y concluirán el 20 de marzo. Durante esos días están programadas cerca de 70 sesiones de entrenamiento que tienen como objetivo reforzar la preparación militar frente a la amenaza de Corea del Norte.
Las dos Coreas siguen técnicamente en guerra desde que el conflicto de 1950-1953 terminó con un armisticio, y Estados Unidos cuenta con un importante contingente militar en el Sur, en parte para disuadir a Pyongyang de un posible ataque.