Sin tregua en Cádiz. Los trabajadores del metal siguen en huelga después de que ayer rechazaran frontalmente el preacuerdo que UGT, sindicato mayoritario, alcanzó a última hora del domingo con la Federación de Empresarios del Metal de la Provincia de Cádiz (Femca). Esta negativa por parte del sector fuerza, por tanto, al sindicato a retomar las negociaciones con la patronal para evitar que el parón se alargue y las pérdidas económicas sigan aumentando.
Hoy tiene lugar la segunda jornada de huelga indefinida que ha generado importantes retenciones de tráfico en diferentes puntos de la provincia, tanto en la zona de la Bahía como en el Campo de Gibraltar. En esta última comarca, los trabajadores habrían aceptado las nuevas condiciones propuestas a falta de conocer la posición del resto de compañeros de la provincia, si bien, finalmente, no se ha alcanzado el consenso entre los empleados de la Bahía.
Recordemos que fue este lunes, tras dos jornadas de movilizaciones celebradas la pasada semana que se saldaron con 12 detenidos, cuando el secretario de FICA UGT en Cádiz, Antonio Montoro, anunciaba que se había alcanzado un preacuerdo con la patronal que, de contar con el visto bueno de los trabajadores, supondría la firma de un “convenio de futuro”. Desde CC.OO. anunciaban su oposición al considerar que el nuevo pacto suponía un “aumento de las desigualdades”, mientras que la Coordinadora de Trabajadores del Metal tachaba el preacuerdo de “basura”. Ante esta oposición, Montero ha afirmado que el preacuerdo “no se ha entendido bien” pero que “todo es reconducible y todo es negociable”, dejando abierta una vía para nuevas negociaciones.
¿Por qué los trabajadores rechazan este acuerdo?
En el preacuerdo alcanzado el domingo entre UGT y patronal se establece la subida del IPC para 2024 y 2025, además de los atrasos, la incorporación del plus de tóxico penoso desde 2024 a 2032, “que se perdió en el año 2012”, además de establecer “una regla del juego para los fijos discontinuos”, condiciones insuficientes para los trabajadores que han optado por rechazar el pacto.
1.- El sector denuncia la falta de mejoras salariales reales ante el aumento del coste de vida: “No podemos firmar un acuerdo que no garantice mejoras económicas reales. Los sueldos no alcanzan para vivir con dignidad”, afirman desde las asambleas locales.
2.- Aumento de desigualdades laborales: consideran que se profundiza la segmentación entre trabajadores de primera y segunda categoría, dependiendo del tipo de empresa o subcontrata. Esto genera condiciones laborales desiguales dentro del mismo sector. “El preacuerdo consolida un sistema desigual donde unos pocos ganan y la mayoría pierde. No vamos a legitimar eso con nuestra firma”, han señalado.
3.- Falta de transparencia y participación en la negociación: Los trabajadores acusan a UGT de haber negociado sin consulta previa a las bases. Consideran que el preacuerdo se presentó “cerrado” y que no responde a las reivindicaciones reales discutidas en las asambleas.
“Este acuerdo no ha sido votado por los trabajadores. Se cocinó entre cuatro paredes, a espaldas de quienes estamos en la calle”, critican portavoces del movimiento.
4.- Vigencia excesiva del convenio sin posibilidad de revisión: En conflictos anteriores del metal en Cádiz, una de las críticas recurrentes ha sido la firma de convenios largos (de hasta 3 o 4 años) sin cláusulas de revisión salarial ajustadas al IPC. Esto deja a los trabajadores atrapados en condiciones estáticas, aun cuando la situación económica empeore. “No aceptamos estar atados a un convenio por años sin mecanismos de revisión anual. Ya lo vivimos antes y salimos perdiendo”, recuerdan veteranos del sector.
5.- Rechazo al “pacto por arriba” y a la estrategia de contención: El rechazo también refleja un malestar acumulado hacia las cúpulas sindicales que, según muchos trabajadores, buscan acuerdos “moderados” para evitar conflicto, en lugar de defender con fuerza los derechos laborales. “La lucha no es para pactar migajas. Es para recuperar derechos”, insisten desde la Coordinadora.
“No podemos estar inmóviles porque los trabajadores continúan de huelga y tenemos que seguir intentando buscar una solución para que estos trabajadores regresen a sus puestos de trabajo”, ha afirmado el secretario de FICA UGT, “no se basa todo en criticar lo que se hace, sino que hay que aportar soluciones”, y es en ese escenario en el que ha asegurado que se va a mover en la jornada de este martes con las partes implicadas en la negociación de este conflicto “para intentar buscar una solución”.
La lucha se recrudece en las calles
Barricadas y cortes en las principales vías de la provincia que dan acceso a los parques industriales. Así ha amanecido hoy Cádiz, donde los dos puentes de entrada a la capital, tras una primera hora complicada, ya han retomado la normalidad, si bien tres piquetas han hecho colapsar la autovía A-7 en los accesos a las industrias, tales como el parque energético Moeve en la Bahía de Algeciras.
Una situación que está afectando también a la Línea de la Concepción, donde su alcalde, Juan Franco, ha lamentado en un comunicado el perjuicio que el “caos circulatorio” está provocando habida cuenta que es un lugar que “no tiene ni un solo metro cuadrado de suelo industrial” y que “está pagando las consecuencias, con situaciones que están rozando la peligrosidad social, ya que hay enfermos que están perdiendo citas en centros sanitarios, además de los accesos a los colegios y a los puestos de trabajo”, ha manifestado, toda vez que ha recalcado que “estas presiones son injustificadas hacia nuestra ciudad”, ha indicado.
Desde la Subdelegación del Gobierno de Cádiz se recomienda a los conductores evitar desplazamientos innecesarios, informarse antes de salir y usar el transporte público, ya que puede haber incidencias. Este mensaje de precaución también ha sido lanzado desde la Policía Nacional, que ha advertido de que los manifestantes han arrojado a la calzada objetos punzantes, clavos y pinchos metálicos “con la clara intención de dañar los neumáticos de los vehículos”, lo que “representa un grave riesgo para la seguridad vial”.

Trabajadores colocan pancartas mientras cortan la carretera de acceso a la factoría de Navantia en Cádiz este martes.
Además, ha indicado que en las inmediaciones de los piquetes se han lanzado contra los agentes “objetos contundentes como tuercas, rodamientos y otros elementos metálicos, lo que incrementa el nivel de peligrosidad en la zona”, por lo que ha recomendado a la ciudadanía “extremar la precaución y evitar transitar por las zonas afectadas”.
Uno de los sectores afectados por la huelga y los altercados es también el portuario, ya que, según ha anunciado el Ayuntamiento de Cádiz, el consignatario del crucero 'Ventura' ha informado que la escala prevista que tenía en el puerto gaditano ha sido cancelada por el armador por motivos de seguridad ante las protestas desencadenadas con motivo de la huelga del metal.
Tensiones en las bases
Mientras la huelga se endurece, crecen las tensiones entre las bases y las dirigencias sindicales, particularmente dentro de UGT. El conflicto se mantiene sin calendario de resolución y con el riesgo de escalada si no se logra un nuevo acuerdo que cuente con el respaldo efectivo de los trabajadores.
La provincia de Cádiz, dependiente en buena medida de la industria auxiliar del metal, vive una situación crítica que podría derivar en consecuencias económicas y sociales de mayor alcance si no se logra encauzar el diálogo en los próximos días.