Los Pirineos se han vuelto a cobrar una nueva vida. En este ocasión ha sido la de un montañero de 65 años y vecino de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), que falleció ayer tras sufrir una caída en la cresta del Pico Russell (3.207 m), en el Parque Natural Posets-Maladeta, en el término municipal de Benasque (Huesca).
El fallecido es Jordi Piera, coordinador responsable de las exposiciones del Museu de L'Hospitalet. Según el portal L'Hdigital, el Ayuntamiento ha confirmado la identidad del montañero en un comunicado en el que destacaba la “profunda tristeza” por la noticia. ”Este año tenía prevista su jubilación, aunque había expresado la voluntad de prolongar la actividad profesional y seguir aportando al servicio público ya la cultura de la ciudad”, añade la nota
Sucesos
El fallecido había desarrollado gran parte de su carrera profesional en el sector cultural
El portal informa de que Piera, licenciado en Historia y con un máster en Gestión Cultural, se incorporó al Ayuntamiento a finales de la década de los ochenta y que en la de los noventa formó parte del equipo de Pla Jove antes de incorporarse al servicio de Cultura, donde desarrolló gran parte de su carrera.
El suceso, del que informa este martes el instituto armado, se produjo a última hora del lunes en una zona de alta montaña de difícil acceso a la que el hombre ascendió en solitario desde el refugio Cap de Llauset.
En el rescate participaron efectivos del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña de Benasque, la Unidad Aérea de la Guardia Civil y personal sanitario del 061 tras tener conocimiento del accidente a través del centro de emergencias 112 a las 21.55 horas.
Una vez sobrevolaron la zona, los rescatadores localizaron el cuerpo del montañero, que había caído desde la cresta del pico. El cadáver fue trasladado en helicóptero hasta la helisuperficie de Benasque y entregado a los servicios funerarios, mientras que la Guardia Civil se ha hecho cargo de las diligencias.
Montañismo
La Guardia Civil se ha hecho cargo de las diligencias
Es la sexta persona fallecida en lo que va de año en actividades de montaña en la provincia de Huesca. El 4 de enero fue hallado muerto el alpinista catalán Gerard Olivé, de 41 años y aficionado a los retos extremos, en el macizo del Aneto (Benasque). Estaba desaparecido desde el día 31 de diciembre, cuando intentaba subir a la cresta de Salenques para hacer un vivac.
Otras víctimas mortales han sido Mikel Lorente, guarda titular del refugio de Cap de Llauset, en la zona del pico Rusell Oriental del Parque Nacional de Posets-Maladeta (Montanuy), que murió el 5 de marzo a consecuencia de una caída sufrida desde 300 metros. O la de un montañero navarro de 50 años que murió el 27 de mayo en la Cresta de Culfreda (Gistaín) tras precipitarse por una ladera 300 metros.
Durante la jornada de ayer, los equipos de montaña de la Guardia Civil rescataron además a un senderista en el Parque Nacional de Ordesa y Monteperdido, a otro en el Refugio de Góriz (Fanlo) y a otra en la Murala de Finistres (Benabarre), a un parapentista en el prado de Ancilles (Benasque) y a un barranquista en el Barranco La Peonera (Bierge).