Las tres familias desalojadas por un derrumbe parcial en el número 16 de la calle Priorat de Sabadell no podrán volver a casa hasta que el propietario repare los daños. Este domingo, los Bomberos las desalojaron después de que cayera parte del techo de los bajos de la finca, donde nadie vivía.
El arquitecto municipal realizó una primera inspección y recomendó que no volvieran a entrar los vecinos, mientras los Bomberos apuntalaron la finca.
De las tres familias afectadas, dos tienen una alternativa en la que vivir por medios propios, mientras la tercera se ha acogido a un alojamiento provisional facilitado por el Ayuntamiento de Sabadell. El consistorio recalca que corresponde a la propiedad reparar el edificio para que pueda volver a ser habitado.