La magistrada que instruye la causa penal por la gestión de la DANA en València ha acordado incluir al nonato de la mujer embarazada fallecida en las riadas como víctima número 229 del procedimiento. Pese a ello, la investigación penal continúa referida a 228 presuntos delitos de homicidio por imprudencia, según confirmaron a EFE fuentes judiciales.
En un auto dictado este viernes, en el que la instructora se pronuncia sobre el vídeo del Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) —difundido por RTVE el miércoles y grabado por À Punt durante un receso de la reunión del 29 de octubre—, la jueza de Catarroja razona su decisión al aludir a “la pérdida de 229 vidas humanas (una de ellas dependiente) y los lesionados”. Esa “vida dependiente” corresponde al nonato de la mujer embarazada, precisan las mismas fuentes.
El 26 de junio, la magistrada solicitó al Instituto de Medicina Legal de València la ampliación de la autopsia de una de las víctimas para dejar constancia de que estaba embarazada de más de seis meses, con el fin de reconocer al nonato como víctima. Entonces subrayó que la fallecida “albergaba otra vida, una vida humana dependiente de su madre, que también pereció el 29 de octubre de 2024”, y que, mediante su inscripción en el Registro Civil, podría obtener “el oportuno reconocimiento e identificación por su nombre” dentro del procedimiento.
La resolución invocaba la Ley 20/2011, de 21 de julio, del Registro Civil, cuya disposición adicional cuarta obliga a que conste en un archivo del Registro Civil, sin efectos jurídicos, el fallecimiento ocurrido después de los seis primeros meses de gestación y antes del nacimiento, pudiendo los progenitores otorgar un nombre.
Entre las 228 personas fallecidas el 29 de octubre figura una mujer embarazada de ocho meses. Con el auto de este viernes —tras el parón estival de agosto y ya de vuelta en las dependencias judiciales de Catarroja, rehabilitadas tras los daños que forzaron su traslado temporal a la Ciudad de la Justicia de València—, la instructora eleva a 229 el número de vidas perdidas en las riadas. No obstante, el procedimiento penal se mantiene por 228 homicidios por imprudencia, al corresponderse con el cómputo de fallecimientos con relevancia típica en esta fase de la investigación.
En las últimas semanas, algunos partidos ya hablaban de 229 fallecidos en la DANA y asociaciones de víctimas y entidades sociales elevaban el balance por encima de 230 al incluir a personas muertas en accidentes laborales ocurridos en las semanas posteriores a la catástrofe. La decisión judicial aporta ahora un criterio formal para el reconocimiento del nonato, sin alterar de momento el número de homicidios imprudentes que centra la causa.