Los bosques de Catalunya ya se han llenado de personas que van con cestos de mimbre para buscar rovellons, trompetas de la muerte, ceps, entre otros. Oficialmente, la temporada de setas ya ha llegado a Catalunya. Cuando Adrià Segura levantó su cesta llena de rovellons ante la atenta mirada del jurado, no se imaginaba que se convertiría en el ganador del 67.º concurso de ‘boletaires’ de Castellar del Riu (Berguedà), con 15,2 kilos.
Adrià Segura llenó una cesta con 15,2 kilos de rovellons.
Fue una gran sorpresa para él. Adrià es abogado y profesor de Economía en la Pompeu Fabra, y era la primera vez que participaba en este concurso. “Yo no soy de Berga, pero mi pareja y mi suegro sí. Él ya había participado otros años y me animó para que lo hiciera yo”, explica en una entrevista para La Vanguardia. El joven de 30 años no se esperaba ganar y afirma que el próximo año se volverá a presentar: “Fue una experiencia muy bonita”.
Siempre había ido a buscar setas con mi abuelo, pero lo había dejado porque él se ha hecho mayor
“Había gente de todas las edades, incluso una sesentena de niños buscando setas. Fue muy bonito verlos participar”, añade. Su afición, explica, le viene de pequeño: “Siempre había ido a buscar setas con mi abuelo, pero lo había dejado porque él se ha hecho mayor y ya no podemos compartir esta afición”. A pesar de eso, hace cinco años que Adrià ha reanudado esta tradición gracias a su pareja y a su suegro, que ambos son de Berga y él es ‘boletaire’.
El ganador del concurso asegura que todo lo que sabe sobre los bosques y el suelo lo ha aprendido de su abuelo, mientras que el conocimiento sobre las especies de setas se lo debe a su suegro. Este año, la temporada de setas ha empezado antes que otras veces: “Desde finales de julio estamos saliendo a buscar setas, pero estos últimos días está un poco parado porque no hay lluvias. Ahora sí que se esperan y nos quedará un mes de una temporada bien buena”.
Este año, la temporada de setas ha empezado antes
Juan Martínez de Aragón, micólogo del Centro de Ciencia y Tecnología Forestal de Catalunya (CTFC), apunta que “esta temporada puede ser recordada como una de las mejores de los últimos años” si las lluvias continúan y no se imponen periodos de mucho calor.
El arte de madrugar y el respeto por el bosque
Según Adrià, un truco infalible para encontrar más rovellons es “levantarse muy temprano” porque así “tienes más ventaja que el resto”. De esta manera, es imprescindible llevarse algo para desayunar allí. También recomienda salir a buscar setas en compañía, ya que hacerlo solo puede resultar peligroso: “Si vas solo te puedes perder. Además, si vas acompañado, la experiencia es más alegre y divertida”.
No solo hay setas tóxicas. La tora es una de las plantas más tóxicas que existen en los Pirineos
El joven abogado también reivindica tener prudencia con los bosques y las setas: “El principal error es coger setas sin estar seguro. Si tienes dudas, mejor no cogerlas. Me da igual que se quede una seta comestible en el bosque, antes que llevarme una tóxica y contaminar el resto del cesto. Y no solo he visto que la gente coge setas que son tóxicas por desconocimiento, sino que también plantas tóxicas”.
“La tora es una de las plantas más tóxicas que hay en los Pirineos”, añade el ganador del concurso. Antes de lanzarse a la aventura, hay que tener unos conocimientos básicos por la propia seguridad. Por lo tanto, Adrià aconseja que si tienes dudas sobre si una seta es comestible o tóxica, es mejor no cogerla, en vez de llevártela a casa para analizarla: “Muchas veces nos encontramos el bosque hecho una basura”.
Uno de los bosques que hay por la zona del Berguedà.
La tradición ‘boletaire’, de generación en generación
El abogado defiende que el futuro de esta afición depende de si se transmite o no: “Es una tradición preciosa que tendría que pasar de generación en generación. No haces daño a nadie y te permite conectar con la naturaleza, pero la tenemos que respetar. Catalunya tiene montañas maravillosas”.
Finalmente, y delante de esta excepcional temporada de setas, Adrià envía un mensaje a los más jóvenes: “Me gustaría que la gente fuera al bosque porque le gusta la montaña y el mundo de las setas, no para hacerse fotos para Instagram. Ir a buscar setas es disfrutar del olor y del momento”.

