Las lluvias y tormentas vuelven a ser las protagonistas en gran parte del país. Este miércoles, 5 de noviembre, la AEMET ha activado avisos naranjas por fuertes lluvias y tormentas en Cádiz, Huelva, Sevilla y Málaga, así como avisos amarillos en zonas de Córdoba y Granada.
En la provincia de Huelva, la alerta naranja estará vigente entre las 12:00 y las 18:00 horas en Aracena, Andévalo, Condado y el litoral, donde se esperan acumulaciones de hasta 30 litros por metro cuadrado en una hora. También se prevén tormentas eléctricas, granizo e incluso la posible formación de tornados.
¿Qué significa cada color?
A través de sus redes sociales, la AEMET ha querido recordar en qué se diferencian los niveles de aviso meteorológico —amarillo, naranja y rojo— y las medidas de precaución que deben tomarse en cada caso.
Estos avisos no indican valores exactos, sino la superación de umbrales que pueden provocar impactos en función de la exposición y vulnerabilidad de las personas o los bienes. Su función es prevenir riesgos, coordinar la actuación institucional y proteger a la población ante los llamados Fenómenos Meteorológicos Adversos (FMA).
Sevilla (Andalucía, España)
El nivel amarillo indica peligro bajo, aunque pueden producirse daños moderados a personas o bienes en zonas vulnerables. En este caso, la AEMET recomienda mantenerse atento e informado de la predicción más actualizada.
El nivel naranja se declara cuando el peligro es importante y los impactos pueden ser graves. La recomendación es estar preparado y tomar precauciones, especialmente si se realizan actividades al aire libre.
Por último, el nivel rojo corresponde a peligro extremo o catastrófico. En este escenario, la población debe seguir las indicaciones de las autoridades, evitar desplazamientos y adoptar medidas preventivas inmediatas.
El sistema de avisos sigue los criterios europeos comunes y se estructura en zonas de meteoalerta, agrupando municipios con condiciones climáticas similares.
Además, cada aviso incluye información detallada como el fenómeno previsto, la probabilidad de ocurrencia, la hora de inicio y fin, y las recomendaciones específicas. Los fenómenos que pueden motivar una alerta incluyen lluvias, vientos, nevadas, tormentas, temperaturas extremas, fenómenos costeros o aludes, entre otros.
Puente Romano de Córdoba
Las comunidades autónomas son las encargadas de activar los protocolos de emergencia y protección civil. En casos de inundaciones o DANA, son los gobiernos regionales los que coordinan la respuesta ciudadana, y las confederaciones hidrográficas gestionan los grandes ríos intercomunitarios.

