El final de una relación suele venir acompañado de un huracán de emociones difíciles de gestionar. Romper un vínculo afectivo no solo significa acabar una relación, sino también dejar de contar con las expectativas, sueños y objetivos que había en común.
En una de sus últimas publicaciones, el psicólogo Luis Miguel Real, experto en adicciones, habló de las rupturas amorosas que llegan de forma inesperada, provocando un profundo shock. Cuando, además, la persona no recibe explicaciones, la situación se vuelve insostenible.
Cuando la otra persona te deja de golpe, sin explicaciones, tu cerebro entra en modo “error 404”. Es como si te arrancaran una parte de tu rutina, de tu identidad y de tu tranquilidad emocional. Y encima sin darte un cierre.
— Luis Miguel Real 🧠 Psicólogo (@LuisMiguelReal4) June 18, 2025
''Cuando la otra persona te deja de golpe, sin explicaciones, tu cerebro entra en modo 'error 404'. Es como si te arrancaran una parte de tu rutina, de tu identidad y de tu tranquilidad emocional. Y encima sin darte un cierre. Vamos, como si te quitaran una serie a mitad de temporada. Solo que aquí no es ficción, duele de verdad'', empezó diciendo el autor de No pienses en un oso verde.
Tal como explicó el experto en la plataforma de Elon Musk, cuando se dan este tipo de situaciones, la persona dejada experimenta una gran confusión mental y, en muchas ocasiones, cae en el autocastigo y el autocuestionamiento, revisando de manera ansiosa sus propios comportamientos en busca de un motivo real por el que su pareja ha puesto fin al vínculo.
Ruptura.
Como no encuentra un motivo de peso y odia quedarse con la duda, su cerebro se inventa teorías que afectan su bienestar emocional: 'No fui suficiente', 'Seguro que hay otra persona', 'Todo fue mentira', etc.
Real señaló que, a nivel neuroquímico, las rupturas tienen un gran impacto: ''La oxitocina (el pegamento del apego) cae en picado, sube el cortisol (la hormona del estrés), y el sistema de recompensa se queda seco. Pero lo que de verdad nos jode es la falta de sentido. No nos preparan para una despedida sin explicación. Y eso nos puede dejar enganchados a la necesidad de entender, de buscar contacto, de rogar respuestas. Pero, spoiler: casi nunca llegan''.
Centrarse en uno mismo
A modo de conclusión, el destacado psicólogo señaló que es fundamental soltar el vínculo y dejar de esperar que esa persona te otorgue la paz que necesitas. ''Aceptar que, a veces, el cierre no te lo da el otro, te lo das tú. Porque si no, puedes quedarte atrapado en una espera eterna, como quien se queda en una estación a la que ya no llega ningún tren'', sentenció el creador de contenido.
