En plena ola de calor en España, que ha dejado uno de los meses de junio más cálidos desde que se tienen registros, las dificultades para llevar a cabo cosas cotidianas tan simples como dormir o comer se multiplican. El calor extremo nos limita, y eso es un hecho, pues con temperaturas tan elevadas tenemos menos hambre, salir a la calle sin acabar empapados de sudor se presenta como una misión imposible y las noches sin aire acondicionado son todo un infierno.
Para quienes ya tienen dificultades para dormir normalmente, noches como las de estos días se convierten en una auténtica odisea, ya que conciliar el sueño resulta aún más complicado. Pero incluso aquellos que normalmente duermen sin problema se están viendo afectados, pues no están acostumbrados a no descansar bien, y eso repercute de forma brutal en su rendimiento y bienestar al día siguiente.
Aunque contra este calor extremo hay pocos remedios que puedan servirnos lejos de usar el aire acondicionado y beber mucha agua, el psiquiatra Alejandro Martínez explica en uno de sus últimos vídeos que existe un truco sensacional para cuando nos levantamos en mitad de la noche y no podemos seguir durmiendo, bien por el calor o por cualquier otro factor.
Con este truco es posible que no seas capaz de hacer más de dos o tres circuitos sin caer rendido
Martínez asegura que, cuando nos encontremos en esta situación, lo último que debemos hacer es empezar a sobrepensar y preocuparnos por el hecho de que no estamos consiguiendo dormir o mirar el móvil tratando de encontrar respuestas, pues eso no hará más que provocarnos ansiedad y continuar retrasando nuestro sueño.
Según el experto, existe un truco para dormir que funciona de forma casi mágica. Asegura haberlo enseñado a varios amigos y familiares, quienes coinciden en que no pueden repetirlo más de dos o tres veces sin quedarse dormidos. Este consiste en cerrar los ojos, poner la mente en blanco y mover los ojos en las cuatro direcciones, es decir, hacia arriba, hacia abajo, hacia la izquierda y finalmente hacia la derecha.

En plena ola de calor, intentar dormir toda la noche se ha convertido en misión imposible
Una vez hecho esto, Alejandro explica que el siguiente paso es hacer un círculo con los ojos en el sentido de las agujas del reloj, y luego de nuevo hacia el otro lado. Es posible repetir el proceso tantas veces como queramos, hasta que nos durmamos, aunque el psiquiatra afirma que es imposible hacer más de dos o tres circuitos sin caer rendidos.
Aunque este truco pueda parecer ridículo, lo cierto es que tiene una explicación lógica, pues, como bien explica Martínez, nos ayuda a dormir porque cambia el foco de atención y hace que nuestro cerebro se olvide de ese pensamiento de que debe dormir. Además, es tan efectivo porque incluye un componente similar al EMDR (Desensibilización y Reprocesamiento por Movimiento Ocular), que estimula ambos hemisferios del cerebro y ayuda a desactivar pensamientos intrusivos.