La sociedad parece cada vez más preocupada por los problemas de salud en general. El estilo de vida moderno, con hábitos como el sedentarismo y la mala alimentación, han provocado un aumento escandaloso de enfermedades graves como la obesidad o la diabetes, lo que eleva la preocupación por el bienestar a nivel personal y colectivo.
No solo eso, sino que tras la crisis de emergencia sanitaria de Covid-19, la mayoría de la gente se preocupa más por su salud física y mental, buscando el origen y analizando los síntomas de sus dolencias. Algunos como la fatiga, los dolores en articuladiones o los picores en piel que con el tiempo se convierte en sensible comienzan a ser más comunes entre la sociedad. Una sintomatología general que, lejos de ser habitual, debería tener un mayor control profesional.

Ilustración 3D de la Glándula de tiroides
Mark Hyman, médico y experto en trastornos autoinmunes, asegura que la sociedad en general suele ignorar este tipo de sintomatología, pero lo que no saben es que podría llevar al diagnóstico o posible diagnóstico de un trastorno autoinmune.
”El mejor regalo es la salud y no te das cuenta hasta que no la tienes”, asegura el médico. “Estamos en una edad en la que o escuchamos sobre trastornos crónicos o cáncer o, lamentablemente, gente muriendo.

El Dr. Mark Hyman, experto en medicina funcional.
El especialista echa la “culpa” a la alimentación que la globalización ha traído a la sociedad moderna en las últimas décadas, por ejemplo. “Ha transformado completamente nuestra microbiota”, asegura. Igualmente, el uso de productos industriales o la exposición a la contaminación ambiental va en detrimento de la salud mucho antes incluso de nacer. “Un feto tiene hasta 284 en la sangre de su cordón umbilical antes de que tome su primera bocanada de aire”, exclama.
”La comida, las bacterias y las toxinas se cuelan en tus células, que terminan convirtiéndose en un estercolero. Comienzan a atacar tu sistema inmune, y de ahí diferentes partes de tu cuerpo, como tus nervios o tus articulaciones”, explica.

La artritis psoriásica, al igual que la psoriasis, tiene su origen en un ataque del sistema autoinmune
Síntomas generales frecuentes en los trastornos autoinmunes
- Fatiga persistente (cansancio excesivo sin causa clara).
- Dolor o inflamación en articulaciones y músculos.
- Fiebre baja recurrente.
- Inflamación o enrojecimiento en distintas zonas.
- Problemas digestivos (diarrea, dolor abdominal, pérdida de peso).
- Caída del cabello.
- Erupciones en la piel (por ejemplo, el típico “en alas de mariposa” en lupus).
- Hinchazón o edema.
- Entumecimiento, hormigueo o debilidad (cuando hay afectación nerviosa).
- Cambios en el peso sin explicación (subida o bajada).
- Aumento de la sensibilidad al frío o calor (en trastornos de tiroides autoinmunes).
“El 93% de nuestros problemas de salud no son genéticos. Es lo que comemos, a lo que nos exponemos, son las toxinas. Podemos cambiarlo, tenemos control sobre ello. La gente sufre, pero puede hacer algo al respecto”, insiste. “La comida es medicina. Mucha gente tiene problemas digestivos y es complicado, porque sabemos cómo arreglarlo”.
Dr. Mark Hyman: “La comida es medicina. Mucha gente tiene problemas digestivos y es complicado, porque sabemos cómo arreglarlo”
“Puede que estés un poco cansado, que tengas un poco de estreñimiento, que tu piel esté un poco seca, que tus uñas se rompan, que te sientas un poco deprimido, que tengas una menos líbido o que ganes un poco de peso”, explica el médico. “La gente no piensa en estas cosas como una enfermedad, pero cuando las unes, ves que se convierte en un problema de tiroides”.

El Dr. Mark Hyman, experto en medicina funcional.
El problema principal, según Hyman, es que la gente no trata la causa de sus enfermedades, sino que se limita a eliminar lo más superficial. “Está bien ir a un especialista para cada dolor, que te da una medicación, pero probablemente no te pongas mejor, sino peor”, asegura. “Si no tratas la causa detrás de todos esos malestares, nunca solucionarás el problema.”