El bienestar físico y emocional es uno de nuestros principales objetivos vitales. Tal y como ocurre con el cuerpo, el cerebro sufre las consecuencias del día, cada uno distinto del anterior. Tan pronto como nos despistamos, podemos sentir dolor, agotamiento, pulsaciones, ansiedad, nervios y muchas más afectaciones. El cuerpo debe estar limpio por dentro y por fuera, pero la mente también merece una atención especial.
Uno de los aspectos clave en este sentido es la depuración mental, además de mantener un equilibro con nuestras distintas rutinas habituales. Un elemento en el que se ha detenido Patricia Ramírez, más conocida como Patri Psicóloga en redes sociales. La divulgadora y experta en salud emocional compartía, mediante un vídeo compartido en TikTok, sus consejos para mejorar nuestros esfuerzos en cuanto a la actividad física.
“¿Eres de las personas a las que no les gusta nada hacer ejercicio? ¿Y ves a todo el mundo alrededor entrenando súper feliz, compartiendo lo bien que se siente, y tú con ese sentimiento de frustración y hasta culpabilidad por ver que tus endorfinas, por más que quieras, no se activan con el deporte? Pero a pesar de ello, piensas, debería llevar una vida activa porque es sano para mí. La actividad física es la píldora de la salud mental y de la salud física”, exponía.
“Si te cuesta mucho, vamos a empezar por unas cosas muy básicas. Lo primero es sentarte un ratito contigo mismo, contigo misma y buscar tu por qué y tu para qué. ¿Por qué llevas tanto tiempo queriendo hacer ejercicio y no consigues hacerlo? ¿Cuál es tu motivación interna? ¿Cuál es tu motivación real? ¿Quieres sentirte más ágil? ¿Quieres tener una vejez más digna? ¿Quieres poder tener más autonomía?”, sumaba.
El poder de la convicción
“¿Te gustaría poder disfrutar de una vida más saludable y cómo igual el ejercicio arrastra otra serie de hábitos? Busca tú para qué. Segundo, empieza por cosas muy básicas. No vayamos a esa actividad física que te genera más pereza, que igual puede ser correr. Busca aquello que en un principio te inicie simplemente y te haga tener la sensación de que ya te estás moviendo: estiramientos en casa, hacer snacks deportivos, algunas flexiones, algunas sentadillas”, añadía.
“O si eres de las personas a las que le gusta socializar, comprométete con una amiga, vete a una clase guiada donde además de ese momento de ejercicio puedas compartir un café con gente que vayas conociendo. Si eres de las personas a las que le gusta más la soledad y no tener un horario rígido, que esa soy yo. pues por ejemplo empezar a correr con el caco en el horario en el que tú quieras, cuando tú quieras, el tiempo que tú quieras a la velocidad que tú quieras”, sentenciaba.


