Ana Brito, conocida en redes por @elshowdebriten, es una de las cómicas más populares del panorama nacional. La comunicadora madrileña, de 34 años, en Poco se habla, el podcast que presenta junto al cantante y creador de contenido Xuso Jones. Cada semana, el murciano y la madrileña charlan con alguno de los rostros más famosos de la actualidad, ofreciendo una entrevista llena de momentos gamberros y divertidos.
Este pasado martes, 21 de octubre, la cómica visitaba Tómatelo con vino, el programa que presentan María Fernández-Rubíes Soler y Roi Sarri. Durante la charla, Brito quiso sincerarse sobre la depresión posparto que sufrió tras su segundo embarazo.
''Me di cuenta de que sufría depresión posparto porque soy una tía que en mi día a día tengo mucha energía, soy bastante alegre y era todo lo contrario. Tenía dos vertientes según al día, o era superviolenta, que me quería cagar en la madre de todo el mundo, pero en especial de los hombres. Y luego tenía otra vertiente, un llanto descontrolado'', comenzaba diciendo
''Me acuerdo un día que fui a casa de mi suegra y me preguntó, 'Anita, ¿qué tal?' y yo 'bueno, estoy fatal, no sé qué me pasa' y la otra dándome un discurso de que no entendía por qué estaba triste porque no debería porque claro triste tendrías que ponerte si el hijo tuviera un problema de salud y yo en plan 'ya lo sé'. La teoría ya me la sé, pero estoy en la mierda y no puedo parar de llorar, no sé qué me pasa'', relataba.
Ana Brito
La situación era tan insostenible que la comunicadora decidió acudir al ginecólogo. ''La cayó una, o sea, se me olvidó que era una persona de 60 años, que tenía que respetarle, se me olvidó lo que es la educación y le dije, 'tú a mí no me habías dicho que te montabas en el Titanic, que soltabas el rumbo del timón y te chocabas directamente con un iceberg que es mi marido''', aseguraba.
De hecho, la creadora de contenido explicaba que se quería divorciar todo el rato del padre de sus hijos. ''En mi chatGPT ponía 'cuánto cuesta divorciarse''', recalcaba. Por ello, le pidió a su ginecólogo que le recetara medicación. ''Tienes que hablar con tu médico'', aconsejaba. Para Brito, aquel fue un momento especialmente complicado en su vida, pues no solo se sentía sola, sino también incomprendida por quienes la rodeaban.
''Te sientes muy sola, sientes que nadie te ayuda, sientes que nadie te entiende, que a veces cuando lo hablas con tus amigas y te dicen la mítica frase de 'no te preocupes que esto va a pasar, te preguntas' ¿cuándo va a pasar?', quiero el día y la hora'', declaraba.


