El desplazamiento se considera un privilegio, y en el transcurso de los últimos años, la noción ha experimentado una metamorfosis total. Quienes disponen de los medios económicos ya no se desplazan de la misma manera que solían hacerlo; ahora poseen perspectivas muy distintas acerca de lo que implica gozar de un período de descanso. Con la llegada de la temporada festiva, esta evolución se manifiesta de forma particular, ya que el turista procedente de Barcelona ya no persigue tanto la opulencia llamativa, sino más bien vivencias de carácter más íntimo y selecto para compartir en el seno familiar.
En Cataluña, esta tendencia se refleja con claridad: durante el último trimestre de 2024, hubo una reducción en la cantidad de viajes, aunque las pernoctaciones se extendieron y el desembolso diario por individuo aumentó cerca de un 17%. Esto significa que se viaja con menor frecuencia, pero cada salida es más profunda, detallada y onerosa. El turista destina más recursos a cada desplazamiento y asigna un presupuesto superior para gozarlo por completo.
Asimismo, a lo largo del ejercicio completo, los residentes de Cataluña incrementaron sus salidas en un 2,2% y su desembolso total en un 8,4%, al tiempo que los traslados internacionales se expandieron un 8,5%. Todo sugiere una modificación en las preferencias, y aquellos con capacidad económica buscan exclusividad, experiencias genuinas y atenciones a medida, distanciándose del turismo masivo, que frecuentemente resulta más costoso. En Guyana Guardian, conversamos con Julia Franch, Directora General de Grupo Bestours, para indagar sobre los patrones de viaje de los barceloneses con alto poder adquisitivo y las actividades más y menos solicitadas en el presente.
Safari
¿Cuáles son las preferencias actuales de los turistas en Barcelona?
Cada vez más, los viajeros barceloneses buscan vivir una Navidad diferente. Principalmente, se busca una desconexión real, tanto física como mental, así como experiencias distintas y conscientes. El objetivo es disfrutar de las festividades de manera íntima y personal. Asimismo, muchos de estos viajeros optan por refugiarse en la montaña o en la nieve, y las villas privadas o resorts para familias se convierten en una de sus principales demandas. Este perfil de viajero busca lugares donde refugiarse con su familia o amigos más cercanos, para pasar una Navidad completamente privada y cercana. De este modo, el tiempo de calidad en familia y con los suyos se convierte en prioridad.
“Otros prefieren poner rumbo a destinos cálidos para huir del frío y regalarse un merecido ‘self-gifting’. En definitiva, quieren empezar el año juntos desde un lugar especial que rompa con la rutina y renueve la forma de celebrar”, según la especialista. Además, la agencia examina la modificación en el tipo de cliente adinerado de Barcelona que se desplaza durante las fiestas navideñas. De acuerdo con Franch, la pauta ha variado en comparación con hace un lustro o una década. “Ya no viaja únicamente la clase más exclusiva de siempre, sino que ahora un segmento más amplio de clientes opta por invertir en grandes viajes puntuales, aunque de manera muy selectiva. Esto incluye a quienes desean darse un capricho excepcional de vez en cuando”.
La transformación en el tipo de viajero y los factores que determinan la selección de un destino turístico.
Franch explica que la intención es distinguirse del turismo habitual. “Se demanda menos lujo ostentoso y más lujo vivencial. Destacan las cenas privadas con chefs locales en villas exclusivas, así como experiencias gastronómicas de origen, desde visitas a productores boutique hasta bodegas familiares bajo el concepto farm to table”, señala la especialista.
Casa moderna con un frente de cristal en invierno
Asimismo, se incrementan las ofertas de bienestar holístico: planes integrales de nutrición y wellness, lodges desarrollados en entornos naturales, y vivencias culturales exclusivas, como recorridos privados por museos o sitios históricos fuera de las horas de apertura. “A ello se suman safaris boutique con guías privados y una movilidad de alto nivel, con servicios Fast Track, salas VIP y conductores privados”, comenta.
Al seleccionar un lugar para visitar, el perfil del viajero de Barcelona no se basa en un solo factor. Cada persona y cada hogar determina sus propias preferencias. “Lo importante es encontrar el equilibrio adecuado entre privacidad, clima, personalización y exclusividad”, señala Franch. Un aspecto que ha ganado importancia recientemente es la búsqueda de seguridad por parte de los viajeros. Esto abarca no solo la estabilidad del lugar, sino también la certeza de servicios regulados, procedimientos confiables, desplazamientos sin inconvenientes y la paz mental de contar con una planificación profesional.
¿Qué lugares han disminuido su popularidad?
Destinos que solían ser muy apreciados por los barceloneses con alto poder adquisitivo, como los Estados Unidos, han experimentado una disminución en el interés a causa de un ambiente político y regulatorio que se percibe como menos propicio para el viajero. En contraste, algunas áreas del Caribe han padecido una saturación turística que merma la percepción de exclusividad y aislamiento deseada por este segmento de la población, lo cual ha llevado a “ya no se demandan tanto”.
Asimismo, la especialista admite que varios centros urbanos europeos de gran afluencia están dejando de ser considerados por aquellos que buscan discreción, distinción y ofertas más únicas. “El viajero premium se inclina ahora por destinos que ofrezcan autenticidad, calma, sostenibilidad y un nivel de personalización difícil de encontrar en los enclaves tradicionales”, comenta.
Asimismo, un número creciente de viajeros se opone a participar en actividades que involucren animales en cautiverio, interacciones intrusivas con las poblaciones locales o cualquier forma de turismo que cause daño al medio ambiente. En cambio, prefieren opciones conscientes que honren la naturaleza, la herencia cultural de las regiones y promuevan una influencia beneficiosa, evidenciando que el lujo moderno se alinea con la preservación y la genuinidad.
Cena privada con Chef
Perspectiva futura: ¿Cuál es la dirección del concepto de Navidad de lujo?
Las plataformas sociales están transformando la experiencia de viajar, con las tendencias digitales y los influencers ejerciendo una considerable influencia en la demanda turística. Estos medios actúan como un motor de inspiración significativo, generando ideas y prefigurando vivencias. “Sin embargo, en el segmento premium, la decisión final se toma sobre criterios más sólidos: exclusividad, confianza, reputación y recomendaciones de Travel Designers, asegurando que cada viaje cumpla con los estándares de calidad y personalización que este tipo de viajero espera”, señala Franch.
Actualmente, los turistas de Barcelona prefieren vivencias completamente adaptadas a sus gustos, pero en este período del año, la mezcla de autenticidad, encanto y comodidad se vuelve primordial. Los itinerarios se elaboran para cada integrante del grupo familiar, asegurando que tanto los más jóvenes como los mayores gozarán de actividades hechas a su medida: desde festejar las celebraciones con reuniones exclusivas con Papá Noel y los Reyes Magos mediante Travelkids o aposentos decorados con esmero, hasta disfrutar de aventuras en lugares icónicos como una expedición de safari en la sabana de África o el privilegio de Islas Secas en Panamá.
La dirección se inclina hacia vivencias singulares que provoquen sentimientos y, a la vez, dejen una huella beneficiosa en los lugares visitados. Los residentes de Barcelona convierten las festividades navideñas en un momento para fortalecer lazos familiares y mejorar el bienestar, celebrándolas en cualquier rincón del planeta mediante escapadas familiares que abarcan varias generaciones, permitiendo que cada integrante de la familia goce de actividades pensadas tanto individualmente como para el conjunto.
“Destinos como Omán, Namibia, Polinesia, Patagonia, Bután o Yunnan en China cobran protagonismo, ofreciendo slow luxury, viajes temáticos ultrapersonalizados, experiencias con expertos y lodges de conservación de lujo, donde exclusividad, sostenibilidad y autenticidad se combinan para crear recuerdos inolvidables para toda la familia”, concluye Franch.




