Uno de los grandes encantos de Madrid tiene que ver con el equilibrio que ofrece entre la inmediatez, la rica oferta cultural y de ocio y el ritmo de vida acelerado de la capital y un entorno natural privilegiado en sus alrededores. Y qué mejor ejemplo que la Laguna de Peñalara, situada en la vertiente sur de la sierra de Guadarrama, parte del sistema central. Para visitarla habrá que acudir hasta el municipio de Rascafría, ubicado en el interior del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama. Una larga cadena montañosa que se extiende a lo largo de 500 kilómetros de longitud, lo que supone que cruza la Península Ibérica de este a oeste. Un lugar privilegiado y que presenta una rica biodiversidad, repleta de paisajes vegetales, ecosistemas de alta montaña, extensos pinares de pino albar y lagunas glaciares, como es el caso de la Laguna de Peñalara.
El paisaje natural que ofrece una vista a esta laguna hace que merezca la pena hacer una escapada y dejar atrás el ajetreo de la ciudad. No obstante, hay que tener en cuenta que se trata de una zona estrictamente protegida, por lo que los visitantes únicamente podrán acceder por senderos designados. Además, se prohíbe el acceso de animales domésticos, tampoco se permite nadar o pescar en las aguas de la Laguna de Peñalara.
Así es la Laguna de Peñalara del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama
La Laguna de Peñalara se encuentra justo a los pies del Pico Peñalara y se trata de una laguna permanente de alta montaña septentrional, tal y como la definen desde el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Sus aguas son poco profundas y ácidas, en las que residen varias especies de microcrustáceos. Cuenta con una superficie de 0,72 hectáreas y una superficie de cuenca vertiente de 46,6 hectáreas, y se sitúa a un total de 2.017 metros sobre el nivel del mar. Cabe señalar que la Laguna Grande de Peñalara presenta una exposición a presiones e impactos muy bajos, y cuenta con la instalación de un sistema de cercado, para así prevenir el acceso de personas, y del ganado, a sus aguas.
En el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama también se pueden encontrar otras lagunas que igualmente merece la pena destacar. Una de ellas es la Laguna de Claveles, situada en un arco morrénico de la zona superior del circo de Pepe Hernando, en el macizo de Peñalara, tal y como informa la página web del Parque Nacional. Al contrario que la Laguna de Peñalara, esta es de carácter temporal, por lo que se seca a mediados del periodo estival. Por otro lado, la Laguna de Los Pájaros, en el norte del macizo de Peñalara, una pequeña laguna elevada conocida por su particular silueta, similar a la de la suela de un zapato. Esta sí que se mantiene durante todo el año.


