El gato de la familia dejó claro que en casa manda él. Mientras todo parecía tranquilo, el felino se adelantó con gesto firme para proteger a su hermano, un dóberman que, a simple vista, impresiona por su tamaño. Sin embargo, lo que ocurrió a continuación fue una inversión de papeles: el perro quedó en un segundo plano y fue el minino el que se colocó al frente, mostrando que la fuerza no siempre depende de los músculos.
Voz cantante
Wasabi tomó la iniciativa mientras Diesel quedaba sorprendido por la reacción
Los protagonistas son Wasabi, un gato atigrado, y Diesel, el dóberman que convive con él. Aunque cualquiera pensaría que el perro es el encargado de cuidar al resto, las imágenes muestran lo contrario. Wasabi adoptó una postura defensiva cuando alguien se acercó a Diesel y no dudó en interponerse. La reacción del felino convirtió la situación en una demostración de carácter que sorprendió por lo contundente que fue.
La diferencia física entre ambos hace que la escena resulte aún más llamativa. Diesel, alto y musculoso, parecía no ser consciente de su propia presencia. El gato, en cambio, sí sabía lo que quería mostrar y no se apartó ni un segundo de su sitio. La seguridad con la que actuó dejó claro que la jerarquía en esa convivencia se organiza de otra manera.
El detalle que muchos subrayaron fue que Wasabi aparecía sujeto con correa mientras el dóberman estaba libre. Para algunos, eso resumía toda la situación. Una usuaria comentó: “Es gracioso cómo tienes que atar al gato pero no al dóberman”. Otro internauta añadió que “el gato siendo el que va con correa lo dice todo”, dando a entender que le tienen que frenar.
Las reacciones no se quedaron ahí. Entre los comentarios más celebrados apareció el de una persona que imaginó lo que pensaba el felino: “No me llaman manoplas asesinas por nada”. Otra aportó que “no ladres a mi hermano así”, como si fuese una advertencia clara. También hubo quien señaló con humor que “los gatos pelean muy por encima de su peso” y alguien remató que “los doberman pueden ser fieros, pero los gatos están locos, y la locura gana siempre”.
Uno de los mensajes más gráficos apuntó a la cola de Wasabi, asegurando que “decía un paso más y te metes en un lío”. Sin duda alguna, una forma sencilla de resumir que, en ese dúo tan desigual, el más pequeño es el que acaba imponiendo respeto.