Jim Rowan, ex-CEO de Volvo: “Será muy difícil implementar la conducción autónoma en entornos urbanos, donde hay obras que cambian a diario, escuelas, patinetes y niños”
Uno de los mayores desafíos del futuro
El ya ex dirigente de Volvo Cars expresaba sus dudas acerca de la conducción autónoma
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Jim Rowan durante su etapa como CEO de Volvo Cars.
La industria del automóvil se encuentra en una de las mayores encrucijadas de su historia. Ese momento en el que solo los más fuertes sobreviven y no necesariamente por ser más grandes: descarbonización, coche eléctrico, baterías, pila de hidrógeno, combustibles sintéticos, aranceles, despidos, nuevos actores como China… Y como guinda del pastel, la conducción autónoma.
Un problema que algunos gurús como Elon Musk anticipaban que se resolvería pronto y que, hoy por hoy, no deja de darle jaquecas a los directivos de la automoción. Era el caso de Jim Rowan durante su etapa al frente de Volvo Cars. El ex-CEO no las tenía todas consigo, aunque no apuntaba precisamente a los fallos técnicos: “Los problemas serán la legislación y las normativas cambiantes en todo el mundo. Por tanto, la conducción autónoma, creo que llegará mucho más tarde de lo que se piensa”, auguraba Rowan en una entrevista a la revista Time.

¿Pero es solo un problema de regulación o hay algo más? “Será muy difícil hacerlo en entornos urbanos, donde hay obras que cambian constantemente a diario, escuelas, bicicletas, patinetes y niños corriendo de un lado a otro”, confesaba Rowan. La cuestión es que “técnicamente podremos conducir de forma autónoma”, pero al ser un sistema no exento de errores, la legislación será más dura dependiendo del entorno: “Creo que será limitado en el futuro previsible”, sentenciaba Rowan.
Por otro lado, el ex-CEO de Volvo tenía clara otra cosa con respecto a la conducción autónoma: “No estoy de acuerdo con la idea de cinco niveles de autonomía. Estoy de acuerdo con dos niveles: manos en el volante, ojos en la carretera y manos fuera del volante, ojos en la pantalla”. Y abundaba en su idea de un futuro de conducción autónoma aún muy lejano: “Creo que la primera parte, las manos al volante, seguirá vigente durante mucho tiempo antes de adoptar el sistema de manos y ojos libres”.
Y hablando de futuro, Jim Rowan también hablaba en la entrevista sobre el suyo propio. Atentos a sus palabras: “Probablemente este sea mi último trabajo antes de retirarme. Tengo la oportunidad de dejarlo todo en esta empresa, con una industria en plena transformación, lo cual puede ser muy beneficioso desde el punto de vista de la neutralidad de carbono si nos lo tomamos en serio. No lo siento como presión, sino como oportunidad”. Está claro que el ex-CEO de Volvo quería dejar su huella, pero la realidad es tozuda y solo pudo estar tres años al frente.