Un grupo reducido de ingenieros nucleares y especialistas en energía lleva meses trabajando en un diseño que, según defienden, podría transformar la producción eléctrica en el Reino Unido y en otros países europeos.
La idea parte de construir reactores nucleares modulares de pequeño tamaño, fabricados casi por completo en planta antes de su traslado para el montaje definitivo. Este método acorta plazos, reduce costes y facilita su instalación en lugares donde una central convencional sería inviable.
Detrás del proyecto está Rolls-Royce SMR, la división de energía nuclear de la histórica compañía británica, que busca situarse en la primera línea de una tecnología cada vez más demandada por la industria.
Acuerdo industrial
Rolls-Royce impulsa un reactor nuclear compacto
El plan más reciente de Rolls-Royce SMR pasa por colaborar con la checa Škoda JS para producir componentes esenciales de estos reactores. El acuerdo plantea instalar de forma parcial hasta 3 GW de capacidad nuclear utilizando el modelo de 470 MWe diseñado por la empresa británica. Según la propia compañía, cada unidad generará energía baja en carbono equivalente a más de 150 turbinas eólicas terrestres.

Los SMR destacan por su tamaño reducido y un sistema de seguridad pasiva de larga duración
Estos reactores, conocidos como SMR, se diferencian de los tradicionales por su menor tamaño y por un sistema de seguridad pasiva que incrementa su fiabilidad. Miden aproximadamente 16 metros de largo y 4 de ancho, y su vida útil prevista alcanza los 60 años. Con una sola instalación, Rolls-Royce asegura poder abastecer un millón de hogares, una cifra que supera la capacidad de otros diseños similares en el mercado.
La apuesta no se limita a la República Checa. Rolls-Royce SMR ha cerrado también una alianza con la firma británica Curtiss-Wright, encargada de desarrollar los Sistemas de Protección de Reactores Diversos No Programables, que permiten detener la actividad de un reactor de forma independiente. Este paso busca reforzar la seguridad operativa y garantizar la continuidad del suministro energético.
Cosas de grandes compañías
La demanda de energía constante impulsa el interés por esta tecnología
El interés por esta tecnología crece en paralelo a las necesidades de grandes empresas tecnológicas, especialmente aquellas que requieren un suministro eléctrico constante para alimentar sus centros de datos.
Algunas de ellas, como Google o Amazon, han mostrado su disposición a incorporar energía procedente de SMR en sus operaciones, aunque en ciertos casos se han encontrado con barreras regulatorias.
Rolls-Royce presenta su SMR como la primera central nuclear nueva diseñada y construida en el Reino Unido en más de una generación. El objetivo declarado es ofrecer un sistema compacto, eficiente y adaptable a distintos contextos geográficos, con una fabricación que se completa en un 90 % antes de llegar a su ubicación definitiva.