“Las consecuencias podrían ser nefastas para la humanidad”: Harvard advierte sobre un objeto desconocido que se aproxima al sistema solar... y que podría ser tecnología alienígena hostil

OVNIs

Un nuevo estudio liderado por el astrónomo Avi Loeb plantea que el objeto 3I/ATLAS podría ser una sonda de origen extraterrestre y reabre el debate sobre la hipótesis del “bosque oscuro”

“Mi punto de vista se ha vuelto mucho más radical cada día”: 100 años desde 'el garabato' enviado in extremis por Werner Heisenberg que dio origen a la física cuántica

Harvard advierte de tecnología alienígena.

Harvard advierte sobre un objeto desconocido que se aproxima al sistema solar... y que podría ser tecnología alienígena hostil

Getty Images

Un nuevo estudio firmado por el polémico astrónomo de Harvard Avi Loeb, que suele levantar expectación por sus afirmaciones elevadas, vuelve a poner sobre la mesa una idea fascinante: la existencia de vida extraterrestre. Sin embargo, en este caso no hablamos de que se haya encontrado vida en otros planetas, sino que se trata de algo mucho más preocupante.

Un objeto interestelar se está acercando al sistema solar y a la Tierra a una velocidad de vértigo. Y, según esta investigación, no parece que se trate de una roca inerte. Tal y como cuenta Loeb, se está estudiando que se trate de algo que parece de ciencia ficción: tecnología alienígena hostil.

Lee también

El objeto en cuestión, denominado 3I/ATLAS, es el tercer visitante interestelar jamás detectado por la humanidad, tras Oumuamua en 2017 y 2I/Borisov en 2019. Pero, según Loeb —que es antiguo director del Departamento de Astronomía de Harvard y una de las voces más mediáticas en la búsqueda de inteligencia extraterrestre— este nuevo visitante no debería ser descartado como una simple anomalía cósmica. 

Junto a los investigadores británicos Adam Hibberd y Adam Crowl, ha publicado un artículo (aún sin revisión por pares) en el que plantea una posibilidad más inquietante: ¿y si 3I/ATLAS fuera una sonda enviada por una civilización alienígena hostil?

Zine Tseng como Ye Wenjie, desterrada a una base donde se intenta contactar con vida extraterrestre.

Zine Tseng como Ye Wenjie, desterrada a una base donde se intenta contactar con vida extraterrestre.

ED MILLER/NETFLIX

Explorando horizontes desconocidos

La hipótesis del “bosque oscuro”

Para argumentar su caso, Loeb recurre a una teoría popularizada por la ciencia ficción, pero con un trasfondo filosófico y astrobiológico inquietante: la hipótesis del “bosque oscuro”, propuesta por el escritor chino Liu Cixin en su novela homónima.

Según esta idea, el universo sería como un bosque oscuro en el que cada civilización avanza en silencio, temerosa de revelar su posición a otras posibles formas de vida. La lógica detrás de este silencio cósmico es brutal: si no sabes si el otro es hostil, lo mejor es mantenerse oculto o atacar primero. Desde esta perspectiva, cualquier señal o presencia podría ser una amenaza existencial.

Y es aquí donde 3I/ATLAS entra en escena. El objeto, con más de 20 kilómetros de diámetro —mucho mayor que el enigmático Oumuamua—, no presenta los rastros espectrales típicos de los cometas, ni parece encajar del todo en el comportamiento de un asteroide. Para Loeb y su equipo, esta rareza merece una atención especial.

“Si 3I/ATLAS no es un asteroide —según el modelo de distribución de objetos interestelares— ni un cometa —por la ausencia de compuestos de carbono en su espectro—, ¿entonces qué es?”, se pregunta Loeb en una entrada reciente de su blog.

El cuerpo celeste, que podría ser un cometa, se acerca a gran velocidad.

El cuerpo celeste, que podría ser un cometa, se acerca a gran velocidad.

Getty Images/iStockphoto

¿Una amenaza real?

Entre la ciencia y el sensacionalismo

No es la primera vez que Avi Loeb se adentra en el terreno de lo especulativo. Su sugerencia de que Oumuamua podría haber sido una vela solar alienígena le ganó críticas entre la comunidad científica, que acusa al astrónomo de sobreinterpretar datos y alimentar teorías sensacionalistas. Sin embargo, Loeb defiende su enfoque como una forma legítima de abrir el marco de posibilidades ante lo desconocido.

“El ejercicio pedagógico que proponemos en este artículo no es sólo para estimular la imaginación, sino también para sentar las bases de cómo debemos reaccionar y analizar futuros objetos interestelares”, defienden los autores en el texto.

Lee también

Vivir en Marte ya es posible... en la Tierra: un equipo de investigadores ha recreado cómo se vivirá en el Planeta Rojo a través de bioplásticos

María G. Dionis
Astronauta en Marte.

Loeb reconoce, no obstante, que la explicación más probable sigue siendo la natural. “Lo más probable es que 3I/ATLAS sea un cometa interestelar, y estamos a la espera de los datos astronómicos que confirmen esta hipótesis”, escribe. Pero añade que el análisis propuesto en el artículo incluye “ideas convincentes” que podrían aplicarse a los más de 10 objetos interestelares que, según cálculos, podríamos detectar en la próxima década.

Aunque la posibilidad de un ataque alienígena pueda parecer sacada de una película de ciencia ficción, Loeb insiste en que la preparación frente a escenarios extremos, aunque improbables, es parte del pensamiento científico riguroso. En un post que acompaña al artículo, advierte de lo siguiente: “Las consecuencias, si la hipótesis del bosque oscuro resulta ser cierta, podrían ser nefastas para la humanidad y requerirían medidas defensivas… aunque tal vez fuesen inútiles”.

Etiquetas
Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...