Sigo los artículos que el genealogista Antoni Tudurí publica en el diario Menorca. En todas las familias menorquinas hay algún miembro con alma de viajero. Además, la emigración masiva de menorquines hacia la colonia agrícola de New Smyrna, en Florida, ha dejado muchas huellas en topónimos y antropónimos que Tudurí estudia y divulga. Esta semana el Menorca ha publicado una doble página muy completa que muestra el árbol genealógico de Robert Francis Prevost, el primer papa norteamericano. Las especulaciones sobre el origen español de la bibliotecaria Mildred Agnes Martínez (Chicago, 1911-1990), madre de León XIV, han llevado a Tudurí a investigar su ascendencia hasta donde le ha sido posible. La del padre, Louis Marius Prevost (Chicago, 1920-1997), no tiene misterio: Italia y Francia.

Pero, a pesar de investigar seis generaciones, la presunta ascendencia española del Martínez materno no se ha podido documentar. El abuelo materno del Papa se llamaba Joseph Nerval Martínez y era un mulato originario de Nueva Orleans, al igual que el bisabuelo Jacques. El tatarabuelo Martínez, cuyo nombre se desconoce, nació en Cuba, donde se casó con la mulata Marguerite Cadenette antes de ir a Luisiana. Tudurí dice que no ha podido retroceder más para hallar el origen del Martínez que hizo las Américas. Como Cuba fue colonia española desde 1492 hasta 1898, podría ser de muy atrás.
El genealogista menorquín documenta que el Papa no es ‘wasp’ como Trump
En cambio, documenta que el primer pontífice norteamericano no responde en absoluto al perfil wasp que representa Donald Trump, sino que es hijo del mestizaje. Tudurí concluye que “afortunadamente el Papa lleva sangre de diferentes orígenes”. Además de la tatarabuela cubana casada con el primer Martínez documentado, la abuela materna de León XIV, Louise Baquié (1868-1945), nació en Nueva Orleans, hija de un zapatero llamado Ferdinand Baquié y de una mujer mulata llamada Eugénie Grambois.
Antoni Tudurí llega a documentar 36 antepasados de Mildred Agnes Martínez, de entre los cuales casi la mitad no son blancos. Es un trabajo muy laborioso. Por fortuna, el árbol genealógico de Robert Francis Prevost termina en él.