La dirección nacional del PP no quiso dar nada de margen a las acusaciones de Isabel Díaz Ayuso y su jefe de gabinete, Miguel Ángel Rodríguez, contra la jueza que ha enviado a Alberto González Amador, pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, a juicio por la presunta comisión de delitos fiscales.
Ester Muñoz, portavoz del PP en el Congreso, se apresuró a mostrar el respeto de su partido a las resoluciones judiciales y a asegurar de forma rotunda que en España no hay lawfare después de las insinuaciones en este sentido de la propia Ayuso y de su jefe de gabinete. Sin embargo, Muñoz también quiso defender a la presidenta madrileña y sostuvo que la situación de su pareja y la del hermano de Pedro Sánchez, que ayer vio como la Audiencia de Badajoz confirmaba su auto de procesamiento y le dejaba al borde del juicio, son “profundamente” incomparables.
La dirigente y su jefe de gabinete ponen en duda el papel de la jueza instructora del caso de González Amador
David Sánchez también va a ir a juicio por prevaricación y tráfico de influencias. Pero en este caso tanto el PP como la propia Ayuso sitúan los presuntos hechos delictivos durante la etapa de Pedro Sánchez como líder del PSOE mientras defienden que los presuntos delitos fiscales de González Amador se produjeron cuando todavía no conocía a Ayuso. “No tengo nada que ver: es una inspección fiscal que se retrotrae a una época en la que ni siquiera nos conocíamos”, señaló Ayuso, quien puso en duda la resolución judicial de la jueza. La presidenta insinuó que la magistrada, que está sustituyendo al titular del juzgado de instrucción, dictó el auto en previsión de lo que iba a “ocurrir a continuación” en el entorno del presidente del Gobierno en alusión a su hermano. Miguel Ángel Rodríguez había ido un paso más allá y había vinculado en X la resolución judicial con un supuesto ascenso del hermano de la juez gracias al Gobierno: “Todo Sánchez es corrupto”, espetó.
No obstante, en la dirección nacional del PP quisieron desmarcarse del señalamiento a la jueza instructora, aunque sin tampoco cargar las tintas contra Ayuso. “Entiendo que Ayuso defienda a su novio, es humano. No sé a quién le puede extrañar”, señaló Muñoz. “Él no se aprovechó de la condición de su novia para llevarse contratos porque no eran novios. Es profundamente incomparable”, afirmó Muñoz, tratando de marcar diferencias entre el caso que afecta al novio de la presidenta madrileña y el que afectaría a la esposa del presidente del Gobierno, Begoña Gómez, todavía en instrucción. Por otro lado, la portavoz del PP insistió en rechazar que haya habido lawfare alegando que el propio ordenamiento jurídico tiene instrumentos para corregir decisiones judiciales.
En todo caso, para el PP, la “noticia del día” es la situación del hermano de Sánchez. “Ya no es una investigación prospectiva. Ahora es un tribunal quien dice que hay que abrir juicio oral”, afirmó la portavoz.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, fue todavía más contundente que Muñoz en la defensa de Ayuso y se preguntó por qué la “sanchosfera” solo se interesa por la situación de González Amador cuando hay “cientos” de casos iguales. En este sentido, el alcalde de Madrid dijo que se tendría que “ver cuántos procedimientos judiciales respecto de este tipo de infracciones hay en España”. “¿Cuántos hay? Y sin embargo, el sanchismo ha decidido que únicamente se hable de este”, lamentó.


