El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha anunciado este lunes que los 28 españoles que iban a bordo de la Global Sumud Flotilla y que siguen retenidos en Israel volverán a lo largo de este lunes a España, después de que este domingo retornase un primer grupo de 21 ciudadanos que denunciaron malos tratos y vulneración de derechos por parte de las autoridades israelíes.
En una entrevista en Catalunya Ràdio, el jefe de la diplomacia española ha detallado que ha hablado con las familias de los 28 españoles que siguen en una prisión israelí para trasladarles que durante este lunes, “si hoy no hay ningún cambio y nada indica que lo haya” , saldrían de Israel con destino a España.

Ada Colau y Jordi Coronas comparecen ante la prensa en el aeropuerto de Barcelona-El Prat.
Albares pide prudencia hasta que “estén todos sentados en el avión y con el avión en el aire”
”Hasta que no estén todos sentados en el avión y el avión esté en el aire, no lo podremos confirmar al cien por cien, pero hoy debería llegar ya el grupo de 28 miembros de la flotilla que todavía siguen retenidos en Israel”, ha explicado Albares, que no ha querido dar más detalles de la operación de retorno ni respecto a los tiempos ni la vía que va a seguir el avión que los traiga a España.
Al respecto, el eurodiputado de los Comuns y abogado de la flotilla, Jaume Asens, ha asegurado que esperan que embarquen este mediodía en Tel Aviv y lleguen a Atenas por la tarde, tras lo cual, viajarán a Madrid.
Sí ha insistido Albares en que su ministerio asume todos los costes de las repatriaciones y que va a “hacer todo lo que haga falta” para que “lleguen lo antes posible a España”.
Entre los 28 activistas aún encarcelados por Israel se encuentran la presidenta del grupo de la CUP en el Parlament, Pilar Castillejo, y el miembro del secretariado nacional de la CUP Adrià Plazas, quien está en huelga de hambre en prisión.
El jefe de la diplomacia española no ha querido comentar los malos tratos que denunciaron ayer los miembros de la flotilla que llegaron a Madrid y Barcelona. “Me voy a reservar todos los detalles hasta hablar más en profundidad con algunos de los miembros de la flotilla y también que todos ellos hayan abandonado Israel”, ha explicado Albares, quien sí ha reconocido que ayer pudo tener “conversaciones muy breves” con algunos de ellos y le dieron “detalles que evidentemente rechazo y no me gustan en absoluto”. Respecto a posibles acciones del Gobierno al respecto, el ministro ha recordado que ya hay una investigación por parte de la Fiscalía.
Quien también se ha pronunciado sobre estos “hechos graves” ha sido el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, quien se ha mostrado preocupado por los mismos aunque ha considerado prioritario que “nuestros compatriotas estén en casa sanos y salvos” en referencia a los integrantes de la flotillas, a quienes les ha atribuido en parte el plan de paz para Gaza hecho público la semana pasada por Donald Trump y aceptado por Hamás. El ministro, en una entrevista en TVE ha eludido concretar si habrá acciones del Gobierno contra Israel. “Ya habrá tiempo para responder desde un puntos de vista jurídico”, ha señalado el titular de Interior, quien ha recordado la personación de España en la denuncia contra el Gobierno de Beniamin Netanyahu en la Corte Penal Internacional y ha destacado la “proactividad” de la Fiscalía española.
Por su parte, el conseller de Unió Europea i Acció Exterior de la Generalitat, Jaume Duch, ha señalado en una entrevista en La 2 que “se tendrá que investigar” el presunto maltrato a activistas de la Global Sumud Flotilla. ”Lógicamente tendrán que entrevistarse a todas las personas que quieran denunciar este tipo de conducta por parte de Israel. De todas formas, yo creo que hoy lo que debemos concentrarnos sobre todo es en conseguir que vuelvan los que todavía están allí”, ha dicho Duch.
Colau emprenderá acciones contra Israel
La exalcaldesa de Barcelona Ada Colau, uno de los seis catalanes que formaba parte de la flotilla que llegó ayer a Barcelona, denunció a anoche en el aeropuerto de El Prat “abusos y maltratos” a los activistas detenidos en Israel, por los que emprenderá “acciones”, e hizo un llamamiento a la movilización para parar los pies a este “Estado terrorista neofascista” israelí.
Colau narró “una experiencia muy dura” a partir de “la detención ilegal” de los activistas -que definió como un “secuestro en aguas internacionales”-, tras el cual fueron llevados a un puerto donde les esperaban “centenares de policías muy agresivos, muy violentos”, que los maltrataron.
Los mantuvieron, explicó, durante horas “arrodillados en el suelo o con la cabeza contra el suelo”, entre “gritos, insultos, humillaciones”, y les arrancaron prendas de ropa y collares, antes de llevarlos a una “horrible” prisión de alta seguridad en el desierto, donde continuó el “trato denigrante”.
Ya de madrugada llegaron a la prisión, donde siguieron sufriendo “cosas terribles”, les despojaron de la ropa que les quedaba y les dieron unas camisas blancas, con las que han regresado a Barcelona. Se encontraron entonces, explicó Colau, en una “prisión de un Estado fascista”, en la que “no se respeta ningún derecho”, donde los activistas no tenían acceso a un abogado, estaban “absolutamente incomunicados” con el exterior, no se les permitía ducharse y no se les facilitaban las medicinas que algunos de ellos necesitaban.
“Se han violado todos nuestros derechos”, denunció Colau, que estaba encerrada en una celda de “seis por tres” metros junto con quince mujeres. La celda daba a un patio donde los carceleros habían desplegado “una foto enorme de Gaza devastada por las bombas”, con una leyenda en árabe: “Bienvenidos a la nueva Gaza”.
Todas esas “situaciones de abusos”, de “amenazas” y de “arbitrariedades” que han vivido los activistas de la flotilla, según Colau, “no es nada comparado con lo que sufre la población palestina cada día”. Por ello, consideró “muy importante” mantener las movilizaciones para detener el “genocidio” en Gaza, para “abrir corredores humanitarios” y para que el Estado “criminal” de Israel libere a los activistas que “aún están en esa prisión horrible”.
Por su parte, el concejal de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona Jordi Coronas, también integrante la flotilla pidió “la implicación de los gobiernos” para frenar “tanto dolor y tanta injusticia” infringida por “el Estado fascista” israelí. Arropado por dirigentes de ERC como Oriol Junqueras o Elisenda Alamany, Coronas explicó que han vivido “el fascismo” en primera persona y que han estado “secuestrados” por el Estado israelí, que no ha “respetado” sus derechos. Con todo, insistió, eso “no es lo importante”, porque “lo prioritario” es detener “el genocidio” que sufren los palestinos.