La Promesa ha vuelto un día más a la pequeña pantalla con un episodio de lo más emocionante. En la última entrega de la serie de La 1 de Televisión Española, la tensión aumenta en La Promesa, donde Vera, Teresa, Lope y Marcelo enfrentan un dilema insostenible: desenmascarar a los duques implica exponerse ellos mismos. Vera está decidida a actuar, pero sus compañeros logran detenerla momentáneamente.
Mientras tanto, la desaparición de Jana mantiene a todos en vilo. Manuel, completamente destrozado, agota todos los recursos en su búsqueda, pero cada pista resulta infructuosa, y el temor de que algo terrible haya sucedido comienza a instalarse entre los habitantes del lugar.
En otro frente, Manuel encuentra una solución al conflicto entre Julia y José Juan, tomando una decisión definitiva que promete acabar con la disputa. Catalina, por su parte, pide a Martina que facilite un encuentro con Pelayo tras verlo merodeando por los alrededores.
Mientras tanto, María Fernández revela a sus compañeras un inquietante descubrimiento: escuchó a Cruz entregar un pago a Gloria Ros, la institutriz, mientras celebraba que todo había salido según lo planeado, dejando claro que ambas conspiraron para forzar la marcha de Jana. Ante esto, las criadas animan a María a destapar la verdad y exponer así a la marquesa.
Avance del capítulo 490
En el próximo capítulo de La Promesa, Pelayo, presionado por Cruz, decide confesarle a Catalina los verdaderos motivos que lo llevaron a La Promesa. La revelación resulta demoledora para ella, quien, sintiéndose traicionada, lo expulsa definitivamente de su vida.
La tensión del momento le provoca un desmayo que casi desemboca en una tragedia. Mientras tanto, Cruz continúa atormentada por la posibilidad de que Leocadia regrese tras recibir una misteriosa llamada, lo que aviva sus temores.
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En otro frente, José Juan se muestra implacable en su deseo de venganza por la muerte de su hermano y, decidido a imponer la ley del “ojo por ojo”, trama un plan para acabar con Curro. Por su parte, María Fernández revela a Manuel lo que escuchó entre Cruz y Gloria Ros, pero cuando este enfrenta a su madre, ella se indigna por el cuestionamiento de sus intenciones con Jana.
Además, los marqueses reciben una noticia devastadora que podría cambiar el rumbo de los acontecimientos: una joven hospitalizada en Villalquino... y podría ser Jana. Entre tanto caos, María Fernández se deja llevar por sus sentimientos y besa al padre Samuel, algo completamente inesperado para este.