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Denuncian al padre de un menor por insultos racistas al árbitro durante el partido de su hija en Zaragoza

Racismo

El acusado le habría gritado “puto negro” e “inmigrante de mierda” durante el partido de su hija

El padre de la menor también ha denunciado al árbitro por los hechos

FERNANDO VILLAR / EFE

El padre de un menor se sentará en el banquillo de los acusados tras gritar insultos racistas a un árbitro durante el partido de baloncesto de su hija menor de edad. El acusado le habría gritado “puto negro” e “inmigrante de mierda” al profesional. Así se desprende de la información publicada por El Periódico de Aragón.

El árbitro federado, nacido en Ghana, ha presentado una denuncia en la Policía Nacional por estos hechos, que ocurrieron el pasado lunes 31 de marzo en el Stadium Casablanca de Zaragoza. En la denuncia, a la que ha tenido acceso el citado medio, el hombre asegura que, cuando ya estaba abandonando el lugar, el acusado se le acercó para insultarle, grabarle y amenazarle durante un buen rato, profiriendo insultos racistas.

El escrito narra que se produjo un forcejeo entre ambos. El denunciante ha contado que esto pasó mientras él trataba de que su agresor dejase de grabarle. La Policía Nacional se personó en el lugar y ambas partes se han denunciado mutuamente. El juicio se celebrará el próximo 10 de junio.

Doble denuncia

El presunto agresor también ha denunciado al árbitro

El árbitro asegura que el presunto agresor, que es abonado del Stadium Casablanca y padre de una de las niñas que habían participado en el partido, le gritó lo siguiente: “Hijo de puta, sinvergüenza. ¿Cómo puedes venir a arbitrar un partido así, puto inmigrante de mierda? Que vienes a robar”. El árbitro ha explicado que en ese momento no hizo caso al hombre y que entendió que estaba enfadado por cómo había ido el partido. Sin embargo, asegura que los insultos no cesaron en un buen rato y que el acusado le continuó llamando “puto negro”.

Fue en ese momento cuando, según la denuncia del árbitro, la víctima intentó cogerle el móvil al hombre para que dejara de grabarle, lo que produjo un leve forcejeo entre ambos. Este terminó con una pequeña herida en la zona interior de la boca del árbitro. El árbitro logró coger el teléfono y lo dejó en un banco del complejo deportivo. Sin embargo, añade que, cuando todo parecía haber terminado, el hombre siguió gritando y amenazó con llamar a la Policía, a lo que el árbitro accedió.

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El árbitro expresa que “no quería que todo esto tuviese tanta repercusión ni llegase a estas alturas, pero parece que es lo que desea él”. El padre fue el primero en interponer una denuncia. “No quería que esto acabara así, pero es luchar porque mi imagen se mantenga limpia y al final es mi verdad contra la suya”, ha contado el árbitro al citado medio.

Desde la Federación Aragonesa de Baloncesto señalan que no pueden intervenir en estos casos y que todo debe quedar a cargo de la Justicia. Sin embargo, señalan que “hemos animado al árbitro a que denuncie”. Así lo ha asegurado el presidente de la entidad, José Miguel Sierra. Por el momento, el Stadium Casablanca ha abierto un expediente al hombre abonado y tomarán medidas o no más adelante en función de la resolución judicial.

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